Historia

Los padres de Rosario decidieron emigrar de su población natal, sita en la provincia de Cádiz, a principios de los 70. Por aquella época Pablo, su hermano mayor, tenía dos años. Fueron yendo hacia arriba resiguiendo la costa mediterránea deteniéndose algún tiempo en alguna localidad donde pudieran encontrar trabajo. Su meta era irse de España y llegar a Alemania. Nada más lejos de la realidad.

Al llegar a Cunia, pensando que sería otra etapa más en su viaje, se establecieron en el Barrio Oliver. Pronto encontraron trabajo los dos progenitores en esta ciudad ávida de mano de obra. Y empezaron a establecer lazos con la comunidad colindante, entre ellos bastantes andaluces y algún que otro familiar lejano suyo o vecinos de su mismo pueblo gaditano. Esa estabilidad les trajo un segundo hijo, Daniel. La vida, dura si, les sonreía y podían formar una familia en estas calles.

Tres años después del nacimiento de Daniel, y 11 del de Pablo, consiguieron añadir a seno familiar a una hija, Rosario. Lo de moverse de la ciudad ya no estaba entre sus planes. Cunia, siendo áspera como ninguna, los había acogido y tenía cierto cuidado de sus vidas. Manuel, el padre, trabajando en la construcción y María, la madre, en tareas domésticas en casas de gente pudiente. Sigue leyendo →