Tras la invasión por parte de Alemania de Yugoslavia y la breve resistencia ofrecida por el país, este se dividió en diversos territorios. Uno de ellos fue el Estado Independiente de Croacia (NDH en sus siglas en croata) en donde los ustachas, un movimiento nacionalista violento, se hizo con el poder. Los ustachas creían que los auténticos croatas eran los católicos y musulmanes, mientras que desdeñaban a los ortodoxos (en su mayoría serbios). Desde su llegada al gobierno practicaron una política de exterminio religioso de los serbios.
Los miembros del grupo nacionalista que había estado operando en la clandestinidad y como grupo terrorista desde 1920 (con sus altibajos) se convirtieron con ayuda de los nazis en el nuevo ejército croata y sus actividades contra la población comenzaron desde un primer momento. Esto hizo que los chetniks (movimiento nacionalista y monárquico serbio) comenzara a actuar en respuesta y en pocos meses provocó la aparición de los guerrilleros comunista de Tito en respuesta a sus abusos contra los propios croatas. Sigue leyendo