Los docte han tenido siempre un gran problema a la hora de comunicarse con el resto de especies debido a su particular fisonomía. Es por ello que han creado unos aparatos que ayudar a este cometido cuando han de interactuar con otras potencias galácticas. Con ello facilitan el intercambio diplomático y comercial.
Las esferas docte son unas sondas de unos 50 centímetros de diámetro que flotan gracias a la tecnología de repulsión magnética miniaturizada que tienen instalada en su interior. Dentro de las esferas se almacenan ciertos lenguajes que son capaces de traducir al docte y viceversa. Debido a la particularidad visual del idioma docte, las esferas incorporan cámaras para registrar esos movimientos. Del mismo modo, estas cámaras registran los movimientos de faciales y corporales del interlocutor para asegurarse de que no sólo la frase, sino la intención y estado de ánimo se traducen correctamente. A pesar de que su capacidad de almacenaje es suficiente las esferas docte se diseñan especializadas en un idioma concreto. Sigue leyendo