Autor: Sergio Jurado

– ¡Se nos viene encima! – gritó el piloto.
– ¡Acción evasiva! – rugió el capitán de la RFP Mirmillon.
El piloto viró con brusquedad. La nave, una patrullera de la clase Gladiator, rechinó lastimosamente durante la violenta maniobra, amenazando con partirse por la mitad debido a la brutal aceleración. La tripulación del puente quedó pegada al respaldo de sus sillas de amortiguación inercial. La nave marodjir, un engendro del tamaño de una pinaza recubierto de aristas oxidadas, pasó por babor, a escasos metros de la cabina. Las demás naves enemigas imitaron la maniobra y se lanzaron contra la RFP Thraex y la RFP Secutor, las cuales también lograron esquivar su acometida. Sin embargo, la RFP Hoplomacho y la RFP Reciario no fueron tan afortunadas. La Hoplomacho fue alcanzada de lleno y estalló en una espectacular bola de fuego, engullendo y llevándose consigo a su matadora. La Reciario fue golpeada en el costado y salió despedida, girando incontroladamente. Sin embargo, su agresora parecía haber quedado prácticamente indemne. Sigue leyendo