Pangea – La maldición del camino (aventura)

Autor: Olef, hijo de Oleg

De repente, sin ningún aviso, un enloquecido gruba surgirá de entre las sombras y empezará a repartir a diestro y siniestro. El gruba está fuera de sí. Entre gruñidos se le entenderás algunas palabras como «matar», «silencio», «destrucción», pero nada con mucho sentido (nota: tampoco es que se entienda mucho a un gruba cuando está cuerdo). Sigue leyendo

Pangea – Agua de Druma

Autor: Olef, hijo de Oleg

El agua de druma son las lágrimas de Taga en las noches oscuras, cuando el poder del Wukran es más poderoso, Taga llora por las inquinas de su enconado rival. Los chamanes creen que si llueve en esas noches es un mal presagio, una señal de que algo muy malo está ocurriendo en un lugar lejano de Pangea. Sigue leyendo

Pangea – Musgo azul

Autor: Olef, hijo de Oleg

El musgo azul es una planta que tiene un ciclo de vida doble. En la primera fase (o fase vertical), el musgo es parecido a un pequeño arbusto de tallo fino y endeble y de una altura no superior a un puño. Tiene pequeñas hojas azules a lo largo de su altura unidas al tronco por pequeños abultamientos llamados «ojos de musgo» y que si se aplastan rezuman un líquido blancuzco parecido al humor vítreo. En la parte superior de la planta las hojas se agrupan formando una especie de flor, que no es tal, y contiene un ojo más grande o, como lo denominan los chamanes «vulva de musgo«. Sigue leyendo

Pangea – Thrinaxodon

Autor: Oleg, Hijo de Olef

Gato de agua

Thrinaxodon - fuente Wikipedia

Los thrinaxodones o gatos de agua no son muy habituales en Pangea y son unos animales que están camino de la extinción. Por otro lado, son una presa temible, astuta y muy feroz si se la acorrala, aunque es raro que ataque a animales más grandes que ella. Son animales solitarios que se unen en pequeñas manadas en la época de reproducción (primavera) con un par de machos, varias hembras y abundantes crías. Es en esta época cuando son más peligrosos y territoriales, pero el resto del tiempo son animales solitarios que habitan en la ribera de los ríos y pantanos (se ha visto alguno en mar cerca de la desembocadura de los ríos) y se alimentan de pequeños crustáceos y roedores.

Los gatos de agua tienen todo el cuerpo cubierto por un fino vello de color gris rayado en diferentes tonos y que les sirve de camuflaje en las zonas umbrías de los bosques típicos de las riberas. Sus patas son cortas, pero fuertes acaban en cinco dedos con garras que crecen continuamente, pero que afilan contra los árboles y las piedras. Es fácil distinguir la zona de una manada porque todo parecerá arañado de forma compulsiva. La cabeza es pequeña y tiene un cuello que le permite girarla casi completamente. Los ojos son frontales y sus oídos son excelentes, ayudados por las pequeñas orejas que puede girar a un lado y a otro. Su hocico no es muy sensible a los olores, pero el morro es bastante duro (pueden dar cabezazos) y lo utilizan para abrir agujeros en la tierra húmeda (lo utilizan junto a las garras para desenterrar a sus presas). Su dentadura es pequeña, con dos pequeños caninos, sólo útiles para sujetar la comida y no para atacar. Son buenos nadadores (tienen un estilo similar al de las nutrias) y trepadores (parecido a las ardillas), ayudados por la pequeña cola que les permite mantener el equilibrio o impulsarse.

Los adultos miden un metro de largo, pero las hembras son un poco más pequeñas. Las crías nacen con 20 centímetros y sin vello, pero alcanzan los 50 centímetros y el vello a los dos o tres días de nacer. Desde ese momento se valen por sí mismas (para cazar y alimentarse), pero permanecerán en la manada hasta alcanzar el tamaño adulto (unas dos drumas)

No saltan mucho; no son capaces de coordinar bien sus extremidades para realizar un salto. Su método de ataque preferido es acercarse sigilosamente a la presa y luego atraparla con su velocidad. Si deben defenderse, podrían saltar contra un enemigo, pero será difícil que superen el metro de altura. Eso sí, si saben dejarse caer desde una rama sobre la cara o el hocico de alguien que se acerque a su camada.

Los chamanes consideran que el Thrinaxodon es el padre de todos los animales con pelo y que habita en Pangea mucho antes que las razas inteligentes lo poblaran. Hablan de él con respeto y le consideran un buen augurio si alguien lo posee como avatar (+1 rastrear, +2 nadar, vello).

Thrinaxodon – Gato de agua

FUE 2/6. Fondo 14. Iniciativa: 17. Nadar: 24. Sprint: 14. Trepar: 24. Ataque garra (x4): 19, tipo I+8 (daño -5 contra criaturas más grandes). Ataque Cabezazo (x1): 19, tipo I+5 (daño -5 contra criaturas más grandes). Esquivar: 22. Esconderse: 10. Avistar: 20. Rastrear: 25. Puntos de diseño: 22

Pangea – Tintes

Autor: Olef, hijo de Oleg

Me han preguntado en ocasiones si los habitantes de las salvajes tierras de Pangea llevan sus ropajes con los colores crudos de las pieles de los animales que cazan. Se imaginan, creo, que el mundo de Pangea es un mundo sin colores, que sólo se mueve entre el blanco de la lana recién esquilada al marrón oscuro del cuero curtido. La verdad es que Pangea es un mundo de colores y no sólo el intenso verde de la vegetación o el brillante rojo de la sangre. Muchos colores se pueden obtener de las plantas y de las piedras y los habitantes de este prehistórico continente descubren más cada día, tiñen sus ropas con ellos (como un símbolo) e incluso cubren algunas de sus viviendas con estos. Sigue leyendo

Luces Fatuas

autor: Olef, hijo de Oleg

Este arbusto acuático aparece en charcas y en zonas de los ríos tranquilas, cercanas a la desembocadura o en planicies sin mucho desnivel. También puede verse en lagos si no son muy profundos. Es una planta de las denominadas tapizantes, de las que se extienden por una gran superficie sin mucha altura cubriendo una zona de la ribera por encima y por debajo del agua. Las hojas que están al aire son más oscuras que las que se quedan debajo del agua, pero ambas son verdes y grandes, como un puño. De sus tallos surgen unas hojas especializadas que desarrollan unas protuberancias bioluminiscentes de un ligero tono azulado. Los zarcillos que surgen en la zona no cubierta por el agua se mueren con rapidez al secarse al sol, pero los del agua parece que permanecen mucho tiempo. Flotan en la superficie y se mecen con el ritmo del agua. Un observador externo podría creer que en el agua se ha reunido un grupo de seres mágicos y están danzando de forma acompasada (de ahí el nombre de la planta). Los zarcillos luminosos son muy pegajosos y tienen espinas en forma de anzuelo, curvados hacia fuera. Sigue leyendo