Número: 239.     4ª época.     Año XXII     ISSN: 1989-6289

239 > Aventuras > Rol Negro > El extraño caso de la bajante atascada (RN). Por: Roberta Alias

 

El extraño caso de la bajante atascada

Toda esta historia comienza en un bajo comercial de una calle en un barrio de Cunia. Una zona suficientemente antigua para aún conservar huecos para negocios locales y no lo suficientemente céntrica para que esos locales se hayan convertido en pisos turísticos.

Nuestro primer protagonista llama indignado al administrador. No es la primera vez que lo hace. Lo que empezó siendo una humedad en el techo de escayola, se ha convertido en una fétida mancha con moho (algo poco recomendable para cualquier negocio). Cuatro veces han estado los fontaneros y le han explicado que debe cambiarse la bajante que, con los años, ha quedado esbozada por la cal del agua (sí, en Cunia también hay cal) y que cualquier residuo (como esas toallitas húmedas que tanto agradan a algunos) provoca un atasco, la tubería se llena, el agua rebosa en el piso de arriba y por las juntas se filtra hasta el local. Al pobre dueño del local, ya no le valen las explicaciones. La solución es cambiar la tubería de la bajante, pues que vengan y la cambien.

Y eso han hecho y con el primer corte ha salido mucho líquido parduzco, espeso y maloliente. Y, además, pequeños trozos de hueso no más grandes que el diámetro de la tubería. El fontanero ha desmontado toda la tubería y vaciado su contenido en la acera (el dueño no dejó hacerlo en su preciosa tarima de madera). Y sí, hay muchos huesos, demasiados para ser restos de comida. Y claro, llaman a la policía y mientras vienen, volvemos con nuestro pobre propietario que está llamando al administrador para acordarse de los familiares de los vecinos que siguen utilizando las instalaciones sanitarias que conectan con la bajante cortada. "¡Voy a cortar el agua a toda la finca y ponerme en la puerta de los contadores!" grita tanto que hace que el teléfono no sea muy necesario.

Y a esto que llega la policía y ve el marrón (literal) y [si tus PJ son policía lee 1; si tus PJ son investigadores privados, lee 2].

1.- Saben que va a ser un caso difícil porque identificar a la víctima es complicado. El forense tendrá que hacer un buen trabajo. Saben que si los restos están en una bajante del edificio, algún vecino tiene que ser el responsable…

2.- Este es el típico caso que implica muchas horas de investigación y la policía cuenta con una buena partida presupuestaria (es principio de año) para derivar estos trabajos a investigadores privados. El jefe de la policía llama a sus contactos y cuando aparecen saben que no va a ser un caso fácil, pero al estar los restos en la bajante, el asesino no puede estar muy lejos. Es alguno de los vecinos…

Nota: Muchas de las noticias de marzo de 2024 del periódico La Verdad tienen una relación directa o indirecta con esta partida. Pásales el enlace (23972 Ver) antes de la partida.

La víctima

Sofía Gutiérrez es una adorable anciana de 75 años que tuvo la mala suerte de ser amable con la persona equivocada: "Hace mucho tiempo que no coincido con su mujer, ¿está bien?" y cuando su futuro asesino llegó a casa, supo que su explicación de dónde estaba su mujer no había sido muy acertada. Lo vio en los ojos de la anciana, en ese levantar de cejas, en ese despedirse con una sonrisa. Sospechaba algo, estaba seguro. Mejor evitar problemas…

"Vecina" le dijo cuando esta abrió la puerta "le he comentado a mi mujer que ha preguntado usted por ella y me ha pedido que me acerque para darle las gracias por teléfono" Y le da el teléfono y cuando la mujer entra para tener un poco de intimidad, el asesino entra detrás de ella y con un objeto contundente la golpea en la cabeza y le abre el cráneo.

Sofía es una de esas mujeres a las que la vida no ha tratado bien. Su marido ha muerto y su único hijo dejó de hablar con sus padres cuando se fue a vivir con aquella muchacha a Brasil o a Argentina, nunca lo tuvo claro. Es una de esas personas que siempre están solas y a la que nadie echará de menos, ni siquiera los vecinos que siempre van a lo suyo. Y todo esto lo sabe el asesino…

El edificio

Un edificio de ladrillo visto de color crema con todas las viviendas bastante exteriores, incluso con balcones y con el tejado abuharillado. Hay tres pisos de viviendas, dos viviendas por planta, más una cuarta planta, donde el ascensor no llega, que tiene un séptimo piso abuhardillado. El portal no es muy ancho, lo mínimo para tener todos los servicios (incluso un cuarto para los cubos de basura que ya no se usa, pero donde algunos vecinos guardan sus bicicletas y coches de bebés). En la planta baja hay un local grande que coge toda la planta del edificio, salvo el trozo dedicado al portal.

Nota: hemos puesto solo tres plantas más el ático para agilizar la partida y que se pueda jugar en una sesión, pero si deseas complicarla, haz que el piso tenga más plantas y añade inquilinos a los nuevos pisos. Añádelos entre el primero y el segundo o entre este y el tercero, pero el tercero y el ático siempre deben ser los últimos.

Ninguno de los vecinos tiene muy claro a qué se dedica el señor del local. Parece una oficina, pero está atestada de libros y por la disposición parece un despacho, un almacén, una tienda de venta online y una timba de partidas secretas. Los vecinos están en lo cierto; es eso y algunas cosas más, pero su enfadado propietario (un tal Juan Carlos) no puede ser sospechoso. Los restos de huesos están en la bajante que circula por su techo. él no ha podido echarlos al inodoro o sumidero.

El piso tiene unos 25 años y aunque empiezan a notársele las costuras, la verdad es que aguantan muy bien: sin grietas en las paredes y sin horribles añadidos vecinales tapando terrazas con carpintería de aluminio o abriendo ventanas donde no estaban previstas (sí, eso pasa en otros barrios de Cunia). Incluso el interior de los pisos, fabricados con paneles de yeso (de suelo a techo, algo de moda en los 2000) o con ladrillo de hueco doble, aguantan sin defectos. La escalera ha sido pintada recientemente. Eso quiere decir que la comunidad es pudiente o que acaban de hacer una derrama que, quizás, no llegue para arreglar la bajante.

Los inquilinos

Te describimos a continuación los inquilinos del inmueble y algunas cosillas que tratarán de ocultar a los investigadores.

1º A

Aquí vive el matrimonio Grema / Garcés que tienen la nada desdeñable cantidad de tres hijos, los dos pequeños son gemelos. Ya eran algo mayores para ser padres cuando tuvieron a los últimos y se les nota en la cara que están algo cansados y estresados. Los niños: Jorge, Jaime y Juan son una delicia si te agradan los niños salidos del mismísimo infierno. La madre os dirá que son hiperactivos, pero la verdad es que son niños normales con padres demasiado mayores incapaces de imponer disciplina (por puro cansancio).

El trabaja en una empresa informática que le permite estar mucho tiempo en casa. Uno de los dormitorios lo han convertido en un despacho (los niños duermen en otros dos y el matrimonio en el cuarto). Ella trabaja para el ayuntamiento de Cunia (en el departamento de saneamiento) y repetirá en muchas ocasiones: ¡Un cadáver! ¡Ya verás cuando lo fuente en la oficina!

Cuando les cuenten lo que ha pasado, mirarán a sus dos hijos gemelos. Estos, más por costumbre que porque sepan de qué están hablando los adultos pondrán cara de no haber roto un plato en su vida (lo cual no es cierto, han roto varios).

Lo que podrán averiguar del 1º A

Grema, el marido, es un hábil experto de criptomonedas y en su tiempo libre (que es mucho) se dedica a especular con las mismas. Su nick en ese ambiente es @patapalo93 y ha dejado sin dinero a más de un incauto. De hecho, está buscado en algunos casos de estafa, pero su identidad "virtual" está bastante oculta. Sin embargo, si escuchan a los gemelos les escucharán perseguir a su hermano mayor al grito de "somos patapalo93 danos todos tus criptos".

Garcés, la mujer, está implicada en el asunto del saneamiento romano que ha dejado a algunos funcionarios con el culo al aire (23972 Ver). Ella fue la que firmó la autorización, aunque, por ahora, su nombre no ha salido en las noticias. Si lo descubren, tendrán cosas jugosas que negociar con contactos periodísticos. La principal pista son los libros que hay en la mesa del salón (cosas arqueológicas de Cunia). Si preguntan, dirá que es una tarea escolar del mayor (y los gemelos empezarán a llamarle Tadeo). Los libros son de un nivel más elevado que los que uno esperaría para un niño de su edad.

Quizás el cadáver es de un periodista especializado que vino a investigar las criptomonedas o el fraude del saneamiento.

Chismes

1º B

Un joven de unos 30 años, J.M Durán, vive en este pequeño piso (1 habitación), pero algunos vecinos comentarán que vienen muy a menudo una joven pelirroja (si el vecino es el del 3º A comentará algo sobre las curvas de la muchacha). Ella es Silvia Niko (y sí, el nombre podría sonarle a alguno de tus PJ con Bajos Fondos: se trata de la sobrina del líder del Sindicato).

Él trabaja en una empresa de marketing y, en concreto, en el departamento de arte gráfico. Sí, Durán es un artista, aunque ahora haya vendido su alma a una empresa de mentiras enlatadas. La casa está llena de dibujos suyos, algunos de Silvia semidesnuda (a la joven no le importa que unos desconocidos la vean, pero si su tío se enterara, sí podría ser un problema, para Durán y para los PJ). Él es amable, tranquilo, un espíritu de la primavera; ella es más fogosa, más inquieta, el espíritu de la tormenta de invierno. Hacen una extraña, pero interesante pareja.

Lo que podrán averiguar del 1º B

En realidad, Durán no es tan buena persona como aparenta. Trabaja para una organización rival del Sindicato y se ha camelado a la sobrina para sacarle secretos. Es posible que alguno de tus personajes le recuerde de algún asunto del pasado. Será un recuerdo vago que le relaciona con los Latinos. Está fichado por la policía como miembro de esa organización, aunque el juez le dejó en libertad por ser su primer delito y ser tan joven.

Ahora, ella ha entrado en su corazón de artista y hace tiempo que le ha dicho a sus jefes que la chica no sabe nada. pero sigue viéndola. Si Silvia sospechara de su viejo doble juego, acabaría muy mal.

Quizás el cadáver sea de algún socio de él o de ella que vino a advertirle que dejará su relación sentimental.

Chismes

2º A

La familia Grande / Buendía está formada por una cariñosa pareja de jóvenes ancianos y aunque sus hijos ya no viven con ellos cuidan de sus nietos por las tardes. Tienen muchos nietos, al parecer, porque la casa está llena de críos y el salón se ha convertido en una especie de jardín de infancia. Ambos adultos son bastante amables y responderán a las preguntas de los agentes sin molestarse. La verdad es que están súper entrenados para aguantar las inquisitivas preguntas de sus nietos (¿Y cuándo viene papá? ¿Y cuándo viene papá?). Una entereza digna de admiración.

Él es ferroviario jubilado. Durante muchos años trabajó como electricista en la estación de la ciudad. No trabajaba en la terminal, sino en las vías y su vieja profesión se nota en algunas de las decoraciones del salón. Algunas maquetas no han sobrevivido bien a los niños.

Ella es maestra (o lo fue), pero dejó de ejercer la profesión al tener a sus hijos. Intentó retomarla después, pero acabó desistiendo.

Lo que podrán averiguar del 2º A

Una búsqueda por internet con la dirección sacará a la luz un negocio ilegal de "guardería" (aunque los niños dejaron atrás el preescolar hace tiempo. Resulta que los hijos a los que atiende la Sra. Buendía no son sus nietos, sino hijos de gente acaudalada de la ciudad que los dejan aquí y la buena maestra les ayuda con las tareas escolares. Los apellidos de algunos de los niños asustarán a los que tengan conocimientos de Bajos Fondos.

Quizás el cadáver es de un inspector de Hacienda que se acercó demasiado al domicilio.

Chismes

2º B

Una joven pareja (Adrián y Asunción) que no lleva mucho en el edificio y asegura no conocer a nadie del mismo. "No somos muy de tratar con los vecinos" dirán. Alguna vez se han cruzado con alguno, pero nada más que los saludos rituales. Si ven su casa, la verán parca de muebles y de decoración. Llevan poco viviendo allí (no más de un año). Están de alquiler y les dirán que el dueño, o, al menos algún familiar suyo, vivió en la vivienda antes que ellos, pero nada pueden decir.

Les darán un teléfono del dueño, pero también les advertirán que es difícil hacerse con él y que casi nunca contesta al teléfono. Ellos les mandan mensajes.

Lo que podrán averiguar del 2º B

En realidad, Adrián y Asunción son okupas profesionales. Llevan viviendo así muchos años. No es que tengan poca decoración y objetos personales, es que viven al mínimo para poder salir corriendo. El teléfono del dueño es, en realidad, un teléfono prepago que ellos tienen e ignorarán las llamadas y mensajes de los investigadores. Si acuden a verlos después de la primera visita, podrán pillarles haciendo el petate o, si ha pasado mucho tiempo, habrán desaparecido.

El piso pertenece a un banco de los que quebró y los investigadores podrán averiguarlo si preguntan en el catastro. Normalmente esta información (una nota simple) cuesta unos 8 euros, pero si les enseñan la placa o les dicen que es un asesinato, se darán un polco de prisa y no les cobrarán. Eso sí, le deberán un favor al del catastro.

Chismes

3º A

Héctor Dante vive solo en un piso de demasiadas habitaciones. Si pasan al interior (se mostrará un poco reticente en invitarles a pasar, pero no se opondrá), verán una casa muy ordenada y limpia, con muchas figuras y detalles que debe ser horrible limpiar todos los días. Los sofas son de color lavanda y en las paredes hay una cenefa de flores que le da apariencia de buen gusto. Hay plantas en diversos rincones, pero algunas muestran hojas que empiezan a amarillear.

Dante vive solo y si preguntan, comentará que su mujer está en el pueblo cuidando de su madre enferma (ella es de León). Sí, es un fastidio, pero la madre es dependiente y el gobierno no ha querido concederle la ayuda. La pobre mujer tiene animales y no quiere venirse a una ciudad tan peligrosa (lo dirá entre comillas) como Cunia.

Lo que acabarán averiguando del 3º A

Es el "propietario" del ático de la cuarta planta. En realidad, se lo ha quedado con una jugada un poco extraña. El piso era de un consorcio que se las tuvo que ver con una fuerte campaña en toda la ciudad y, especialmente, en este edificio. Detrás de esa campaña estaba Dante que no quería tener fiestas incontroladas sobre su cabeza. Al final, lo que podría considerarse un chantaje, el consorcio llegó a un acuerdo con el propietario. Le dió las llaves del piso a cambio de que les dejara en paz. No se hizo el traspaso de titularidad, pero el piso dejó de estar disponible.

Es el asesino. Mató a la mujer en un arrebato de furia y luego, fríamente, se deshizo del cadáver por el inodoro. Pero es un tipo listo, no lo hizo en su casa, sino en el ático (fue el motivo de la discusión entre él y su mujer; ella no veía bien lo que había hecho apropiándose de él y le amenazó con denunciarle).

Alerta de detalles escabrososNo leer sin protección: Héctor Dante desangró a su mujer en la bañera (una de gran tamaño propia de estos pisos alquilados por días) y, allí mismo la troceó en trozos grandes (piernas, brazos, cabeza y tronco) y los metió en la nevera (quitando todas las baldas). Lentamente, fue sacando trozo a trozo y cortándolo en pedazos más pequeños y se deshacía de ellos en el inodoro, siempre trabajaba en la bañera, donde utilizó una madera para proteger el fondo de su herramienta (una sierra de vaivén habitual en carpintería). Sin que Héctor lo supiera, un hueso de la cadera se quedó atascado en el codo de la bajante. No obstaculizo la función del desagüe, pero, poco a poco, otros restos se fueron quedando en ese codo e, inadvertidamente, el desagüe empezó a ir más lento.

Pero esto fue hace un año, aproximadamente, hasta que la entrometida del 3º B preguntó por la mujer de Héctor. Ya le había contado que estaba cuidando a su madre, pero él creyó que empezaba a sospechar. Con una argucia se coló en su casa y la mató. Para evitar sospechas, la envolvió en una alfombra que se había manchado del piso, subió al ático y ahí empezó a deshacerse del cadáver con el mismo procedimiento, pero la cadera de la mujer mantuvo los restos de su vecina y ese atasco terminó saliendo por el bajo comercial. Que es lo que nos ha traído aquí hoy.

Chismes

3º B

Nadie contestará a la puerta del 3º B y si preguntan a los vecinos del 1º o el 2º dirán que hace tiempo que no la ven, pero no les ha extrañado porque no suelen coincidir en horarios. Si preguntan al del 3º A, les dirá que se ha ido una temporada a vivir con su hija (el resto de vecinos hablará de hijo, no hija) a Argentina (o Brasil, no lo recuerda) y que lleva un tiempo sin verla.

Lo que acabarán averiguando del 3º B

Los huesos de la bajante son de esta señora, excepto uno.

Cuando identifiquen a esta mujer como la víctima y hagan una investigación exhaustiva de la casa, descubrirán manchas de sangre en el suelo con una ausencia rectangular (posiblemente una alfombra). Además, bajo un armario, hay pequeños restos de cristal. Se trata de la pantalla de un móvil (el que sostenía la víctima cuando murió).

PD: la alfombra podrá aparecer (o podría ya haber aparecido) en el vertedero. Sabrán que se utilizó para guardar el cadáver y que, por los registros, fue recogida hace unos meses en un contenedor del barrio. Si ya ha sido descubierta, es posible que esté como un caso pendiente de resolución en la policía.

El piso está vacío. Los vecinos o el administrador de la finca les contarán que el piso pertenecía a un consorcio de pisos turísticos, pero que tras las protestas vecinales dejaron de alquilarlo (para descanso de la comunidad). Que sepan, nadie lo usa.

Lo que esconde el 4º

El piso parece limpio, como si alguien lo limpiara con regularidad. No tiene polvo acumulado, pero tampoco parece que lo use nadie. Llamará la atención que las baldas de la nevera estén en el fregadero.

Una investigación forense (intensa) revelará manchas de sangre en la bañera y en la nevera, así como gotas sueltas en algunos lugares de la casa. Lo han limpiado con detergentes comerciales (Bosque Verde), pero no han eliminado los restos adecuadamente (no uses marcas blancas en la limpieza de tus crímenes). Pasará un examen superficial, pero no uno profesional.

En un lugar del salón hay también restos de sangre en abundancia. Parece que allí mataron a alguien. Es posible que los personajes crean que fue la mujer del 3º B si el forense ya la ha identificado, pero no, es la mujer del 3º A y, cronológicamente, la primera víctima.

La investigación

Investigar a los vecinos

Los vecinos se mostrarán reacios y esquivos. Todos tienen algo que ocultar y salvo que les digan el motivo de la investigación (el asesinato) pensarán que les están investigando a ellos o pensarán que pueden pillarles.

Si pueden, señalarán cosas raras de otros vecinos (ver lo comentado anteriormente).

Pueden buscar información de los vecinos en diversos medios:

A través del administrador podrán conocer cosas de la comunidad. Este hombre, llamado Javier José, no pondrá reparos en compartir datos de los vecinos. Se le verá bastante apurado y, en todo momento, tratará de que no le salpique nada. Nota: en Cunia, como en otras ciudades del mundo, los administradores solo quieren no tener problemas en la finca (y cobrar todos los meses, claro). La administrador sabe que los vecinos del 2º B son okupas, pero pagan la comunidad y ningún vecino se ha quejado. Sí, el piso tiene una deuda grande, pero no es de sus actuales inquilinos.

En el catastro o, mejor aún, en el registro de la propiedad podrán obtener mucha información sobre los pisos. Esta información es privada (y está bastante protegida por la LOPD - Ley Orgánica 3/2018), pero si van como policías, convencen a la persona del registro de que están investigando un asesinato o consiguen una orden judicial, podrán enterarse de los datos inmobiliarios de todas las viviendas: quién es el dueño real de cada piso.

Mediante sus propios contactos podrán descubrir cosas de algunos vecinos. Cualquier relación con investigadores o periodistas del crimen organizado les podrá informar que Durán es un miembro del Sindicato y que Silvia es familia cercana de uno de los jefes de los Latinos. Una foto de ellos es lo único que necesitan enseñar a su informante. Estos contactos del crimen organizado también podrán relacionar la finca con el lugar en el que algunos hijos de jefes pasan algunas horas de la tarde desde hace años (los nietos del 2º B).

Si investigan en internet podrán encontrar antiguos anuncios que ofertan servicios de guardería en vivienda privada. El anuncio ya no está visible (es información que está en archive.org) y el teléfono no está operativo (si llamas, nadie lo coge), pero una consulta a la compañía de teléfono (Cable Cunia) les llevará hasta los vecinos del 2º A.

La Guardia Civil o la Policía Nacional son los que controlan la entrada y salida de gente a través del aeropuerto y el puerto. Si bien es verdad que el control en tren o carretera no existe, los guardias civiles podrán consultar otras bases de datos policiales de otros lugares para saber si alguien ha abandonado el país en determinadas fechas. La consulta tardará unas horas. También podrán utilizar a estos cuerpos para investigar la presencia de una persona en otros países (vía Embajadas) o comprobar si una persona reside en la vivienda familiar de determinado pueblo. Todas estas investigaciones serán negativas dado que tanto el viaje a Sudamérica como a León son patrañas del asesino.

Los gemelos: estos adorables niños del 1º A jugarán a todas horas y se perseguirán diciendo un extraño nick (patapalo 93) y robándose los criptos (ellos no tendrán muy claro que es dinero) en plan ladrones de las películas y se dispararán y correrán, pero lo importante es lo que dicen. Los personajes podrán buscar datos en la web profunda o tirar de contactos que entiendan del tema.

La Policía Federal (u otros cuerpos policiales) podrán descubrir la localización del teléfono prepago que los okupas utilizan para disimular que la casa tiene dueño. No sabrán quién ha comprado el teléfono, pero sí dónde (lo que les permitirá conocer la identidad de los compradores: sí, los propios inquilinos). Y la policía también podrá conocer (vía compañía telefónica) dónde se activó el teléfono por última vez: el mismo día que lo compraron en la finca del asesinato.

La prensa: Ya sea en La Verdad (enlace Ver) o en otros medios, consultar los periódicos les permitirá conocer la trama de corrupción del ayuntamiento en el tema del saneamiento romano. Si relacionan esa noticia con el trabajo de la mujer del 1º A, podrán presionarla en los interrogatorios, aunque ella no es la asesina.

El Registro Civil guarda copia de nacimientos y fallecimientos y la policía (o una orden del juez) puede buscar parentescos, ascendientes o descendientes de los vecinos. Si es verdad que tienen una madre viva en León, si es verdad que tienen un hijo, si los hijos tienen nietos, etc.

Y claro, a través de las entrevistas con los propios vecinos.

El saneamiento de la ciudad

Cuando identifiquen que los restos son humanos y que hay dos, podrán pensar que alguno de esos restos han acabado fuera del edificio, es decir, en el saneamiento. Contrario a la imagen de las películas, los colectores de la ciudad no son enormes calles subterráneas con ríos caudalosos en el interior. En realidad son canalizaciones subterráneas que van agrandando de diámetro hasta que sí llegan a lugares donde una persona podría entrar (metiendo los pies y más) en suculento caldo urbano. Sin embargo, en el imaginario colectivo están estos "colectores autopista" y, ¿por qué no?, Cunia podría ser así si crees que eso ayudará a la partida.

La esperanza de nuestro asesino es que el saneamiento de la ciudad arrastrara los trozos del cadáver y se los llevara lo suficientemente lejos como para que nadie pudiera localizar el lugar en el que se arrojó, pero lo que nuestro asesino no calculó es que el cuerpo humano no flota y que muchos de los trozos se fueron al fondo donde se quedaron enganchados. Ahora la carne habrá desaparecido (en su mayor parte, puede que quede algo de músculo y piel) y no quedará nada de los tejidos blandos internos (hígado, pulmones, corazón), pero alguno de los trozos de huesos se habrá enganchado en alguna arqueta o en el fondo de los colectores. Algunos huesos han flotado, pero estarán en las piscinas de decantación del sistema de saneamiento

Si tus personajes son como los míos, se empeñarán en realizar la investigación del saneamiento por sí mismos. Sé cruel y asqueroso, describe con detalles olfativos ese mundo que les rodea (y no te olvides de las ratas; encontrarse a una en un colector es una experiencia inolvidable). Una vez que encuentren el primer hueso, lo normal es que manden a gente especializada en esta tarea (es decir, poceros que colaboren con la policía o el juzgado).

Todos los huesos hallados serán de la primera víctima. Los de la segunda estaban en la bajante de la finca.

Pista adicional: si hablan con la gente del saneamiento de la ciudad (con los curritos, no con los de oficina), les dirán que el saneamiento de esa zona lleva un tiempo dando problemas con atascos y, sobre todo, con la presencia de muchos bichos. No, ellos no habrán pensado en un cadáver troceado, más bien en restos orgánicos arrojados por inodoros indebidamente.

Informe forense

Los forenses son personas ocupadas en Cunia porque, aunque no lo parezca, muere mucha gente en circunstancias extrañas que hay que investigar. Por otro lado, son gente a la que les gusta trabajar solo una vez en las cuestiones administrativas (rellenar informes) y, por tanto, intentan hacer solo un informe final de la autopsia. Sin embargo, son parte del sistema policial y judicial y saben que el progreso de la investigación depende de la información que ellos puedan facilitar. Saber la hora de la muerte o si el atacante es diestro o zurdo ayuda a limitar sospechosos en una ciudad de millones de habitantes. Por ello, te graduamos la información forense en varias fases. No serán informes oficiales, sino conversaciones rápidas del forense con los personajes. Gestionarlas para mantener el ritmo y la atención de los personajes.

Primera conversación

Los huesos son humanos. Esto puede parecer trivial, pero dado el tamaño podría ser cualquier otra cosa (alguna mascota, con la nueva ley animal, la cosa de deshacerse del gato muerto se está complicando). Los huesos han sido cortados con una sierra eléctrica y dada la imprecisión de los cortes es una de estas manuales (no una mesa de corte).

Segunda conversación

Los huesos analizados pertenecen a una mujer de edad avanzada (70 años o más). Se han encontrado algunos implantes dentales y una placa de titanio. Se confirma el uso de la sierra manual en el desmembramiento, pero este fue post mortem (después de matarla). Se desconoce la causa de la muerte.

Tercera conversación

¡Hay dos cadáveres!

El forense no esperará a que le llamen sino que dada la importancia, él mismo llamará a los investigadores. Uno de los huesos hallados (de una cadera) no pertenece a la víctima inicial. Hay dos cuerpos. Imposible determinar la edad o género del segundo cadáver

Esto podría llevar a los PJ a visitar las alcantarillas.

Cuarta conversación

La placa de titanio le habrá permitido identificar el cadáver de la segunda víctima como Sofía Gutiérrez.

Si quieres complicar la partida, la placa podría llevar a un varón. ¡Una tercera víctima! No, un médico chapuza que anota mal el papeleo al que los personajes tendrán que visitar y presionar para que identifique a la víctima.

Además, si han recuperado más huesos del saneamiento, el forense confirmará que es una mujer de unos 50 años.

Informe final

En el informe final del forense solo se añadirá que la primera víctima encontrada fue asesinada por un golpe contundente en el cráneo. La falta de algunos restos y el tamaño de estos no permite identificar el arma. Pero debe ser algo fuerte y de unos 2 centímetros de grosor (como una llave inglesa).

La segunda víctima no se puede identificar, pero (si localizaron restos en las alcantarillas) fue asesinada antes, tenía el cabello negro y una altura de 1:70 o algo menor. Los huesos están serrados con la misma herramienta que la víctima hallada en el colector, aunque la hoja estaba más afilada.

El forense cree que para trocear a las víctimas se utilizó una sierra de carpintero de vaivén.

Cerrando el caso

El asesino podría darse cuenta que sospechan de él si incitan mucho en preguntarle por la vecina o por la mujer. En ese caso, intentará escapar de la ciudad y si los PJ han sido precavidos, podrá iniciarse una persecución. Elige el medio de transporte que más te agrade: coches a toda velocidad por la autopista, trenes en marcha con gente subiendo por el tejado, aeropuertos con el tipo robando un vehículo de maletas y tratando de escapar por el otro lado de las pistas mientras los aviones aterrizan. No escatimes en espectacularidad, tenemos presupuesto.

También podrían prepararle una encerrona en un interrogatorio final en su casa o intentar llevarle a la comisaría. Sabe que si le atrapan se va a pasar la vida en la cárcel (prisión perpetua revisable de esa), que su nombre aparecerá en todos los medios como un asesino machista (sería bueno que los hechos ocurrieran cerca del 8 de marzo) y, por ello, tratará de huir o pelear (lo que hará hasta que le maten). Puedes añadir espectacularidad si huye al ático y sale al tejado y trata de huir por las azoteas de las casas vecinas. ¿Quién no quiere perseguir a un asesino saltando de cornisa en cornisa?