(Tipo 87 Dowa)
Los autoametralladoras son vehículos blindados populares, especialmente entre las tropas coloniales, ya que son baratos de producir y de mantener. Por ese motivo, durante la Primera Guerra Mundial y en los años posteriores numerosas compañías fabricaron numerosos diseños con el que responder a la demanda creciente.
Un ejemplo de esto es la situación en la India. A partir de 1915, y con las tensiones nacionalistas en alza, el ejército británico comenzó a emplear coches blindados para apoyar a las tropas, especialmente en la frontera noroeste (la actual frontera entre Afghanistan y Pakistan). Los resultados fueron tan positivos que su empleo se extendió por el resto de la India. Tras finalizar la PGM, el gobierno colonial (el Raj británico) compró 16 Rolls-Royce Armoured car, pero su precio era excesivo para sus finanzas, por lo que se buscaron otras alternativas más asequibles.
La opción escogida fue un diseño de Crossley Motors, una compañía británica asentada en Manchester y que tenía una larga tradición de fabricación de vehículos militares. En 1923 suministró 100 chasis de su robusto vehículo IAG1 a la firma Vickers-Crayford, que se encargó de la superestructura, blindaje y equipamiento. Así nació el Vickers Model 25 Crossley, también llamado en ocasiones Indian Pattern, ya que su principal usuario fue el Raj, aunque también vio servicio en Sudáfrica, Irak, Canadá, Argentina, Estonia y Japón. De este último hablaremos un poco más adelante. Sigue leyendo