1808 – Juan Martín Díez «el Empecinado»

Autor: Don Toribio Hidalgo

Juan Martín Díez nació en 1775 en Castrillo de Duero en la provincia de Valladolid (su casa aún se conserva). Eran labradores en su familia y, según las fuentes, no les iba mal. La agricultura y la ganadería eran uno de los principales motores económicos de España en 1808. El trabajo de labrador era duro, pero si las tierras eran fértiles, como las de Valladolid, y el agricultor las tenía en propiedad, era posible tener una vida desahogada. Eso sí, las sequías o la climatología adversas podían arruinar a cualquiera en el momento más inesperado. Sigue leyendo

1808 – El convoy de los pertrechos (aventura)

Autor: Don Toribio Hidalgo

Años después del 2 de mayo

La guerra de la independencia está tocando a su fin. Los ejércitos franceses se han desgastado frente a la tenacidad de los españoles, la profesionalidad de los ingleses y los reveses de la guerra en otros sitios de Europa (Rusia). Las tropas francesas están en retirada ordenada, intentando frenar a los enemigos en las fronteras montañosas del sur de su país (el norte del nuestro). Junto a los soldados derrotados viaja un abigarrado grupo de personas que prefieren el exilio con los franceses que la justicia (o venganza) de los españoles, gente que ha convivido con ellos como vivanderos y que ahora debe huir con ellos. Sigue leyendo

1808 – Sable Klingenthal

Autor: Don Toribio Hidalgo

Mientras que a la caballería pesada de la época se la dotaba de una espada recta y más ancha de lo habitual, a la caballería ligera, sobre todo a la francesa, y a la armada se la equipaba con un sable curvo. La espada recta era preferida para dar estocadas (que según algunos teóricos de la época era la mejor forma de combatir desde el caballo), la hoja curva, sin embargo, era mejor para dar tajos (cuchilladas). En la práctica, los sables curvos se utilizaban para dar estocadas también y los tajos quedaron olvidados en las justas medievales (o en la época de los piratas). De entre los muchos sables de la época, el Klingenthal era uno de los más famosos. Sigue leyendo

1808 – La muerte de Manuela Malasaña

Autor: Don Toribio Hidalgo

El problema de convertirte en una calle (o un barrio) de una ciudad es que tu vida se transforma en función del interés del historiador. Cuando alguien habla de Malasaña, enseguida nos aparece la imagen de una heroína a la altura de otras mujeres u hombres de la Guerra de la Independencia (cuya imagen, por otro lado, también la hemos distorsionado un poco). Sigue leyendo

1808 – Don José

Autor: Don Toribio Hidalgo

En la madrugada del 14 de febrero de 1810, dos figuras embozadas se reúnen en la niebla en medio de un campo de labranza que parece abandonado o en barbecho. Una de ellas le da un sobre a la otra y esta, en silencio, lo recoge. Junta sus manos alrededor de él y parece musitar unas palabras, como una oración; tras un breve instante, el sobre desaparece bajo sus ropajes y ambas figuras se separan. Sigue leyendo

1808 – Jaime Alfonso «El Barbudo»

Autor: Don Toribio Hidalgo

retrato de Jaime Alfonso El Barbudo

Con el puñal en el cinto
Y el trabuco naranjero,
Desafío al mundo entero
y el poder del huracán.
Hijo soy de la Aventura
Y mi patria las montañas
Que en sus lóbregas entrañas,
Seguro asilo me dan.
Puesta a precio mi cabeza
Por el mundo se pregona,
Pero si el Rey me perdona,
Desprecio el perdón del Rey.
Que es mi dicha mi caballo
Y la presa el bien que adoro,
La libertad mi tesoro,
La independencia mi ley.  Sigue leyendo

Mare de Déu

autor: Don Toribio Hidalgo

Cuartel de los PJ

Estamos a finales del verano de 1812. Las tropas francesas han sufrido varias derrotas y José I ha abandonado Madrid y se ha instalado en Valencia. Una unidad francesa ha tomado posiciones en la localidad de Manises (a una menos de una jornada de la capital de la provincia) para frenar cualquier movimiento de las tropas británicas y españolas. Los jugadores forman parte de esta unidad y sus mandos están acantonados en un villorrio a las afueras, cercano al río Turia, conocido como el Barranquet. Le rodean algunas huertas y las plantaciones típicas de las riberas de los ríos, así como algarrobos, oliveras, viñas y almendros. Las tropas ocupan algunas fábricas de cerámica de la ciudad que, por la guerra, estaban desocupadas. Sigue leyendo

Francisco Tomás de Anchia «Longa»

autor: Don Toribio Hidalgo

Francisco Tomás nació el 10 de abril de 1783 en un caserío de Vizcaya conocido como Longarte de donde procede su nombre como guerrillero durante la Guerra de la Independencia. Sin embargo, gran parte de su infancia la pasó en La Puebla de Argazón (Burgos) donde llegó a ejercer el oficio de aprendiz de herrero, a casarse con la hija del dueño y heredar de esta forma la herrería. Oras fuentes, sin embargo, señalan que estudió Humanidades en la villa de Marquina (cerca de donde nació) al servicio de Miguel Andrés de Barroeta y Murtategui. La importancia de la discrepancia radica en que algunos dicen que estaba en La Puebla cuando llegaron los franceses y otros en Marquina. Algunos dicen que es un guerrillero burgalés y otros un guerrillero vasco. Sigue leyendo