Llego hasta aquí
Manos frías
Los patios de juego están vacíos. El viento está quieto. -Suede (2018). Cold Hands The Blue Hour.-
Primera estrofa: recapitulando
Desde el capítulo anterior de esta campaña deberemos haber dejado pasar un tiempo largo para los personajes jugadores, unos diez años. Esto puede ser un problema de cara a la continuidad de la campaña que estéis jugando, con lo que podemos recomendar varias opciones.
Una, crear versiones envejecidas de vuestros personajes, jugando una sesión de creación en la que avancéis esos diez años como experiencia laboral. Aunque no recibiendo los mismos beneficios que se obtendrían con 10 años de ese paso en la creación de personaje ¡serían demasiados! Lo que proponemos es que cada Pj reciba 50 puntos de desarrollo para gastar en niveles de habilidad, así como +2 a los niveles profesional y sumergido de su dinero. Una vez termine la campaña, podréis volver al pasado y jugar con vuestros personajes en el punto que les hubierais dejado.
Otra opción es crear personajes nuevos para esta segunda parte de la campaña. Lo único que habrá que buscar es una excusa para que tengan acceso a la información de los casos de los antiguos personajes. También deberá haber un motivo para que se recurra a ellos, para que el contacto noruego les considere adecuados para el trabajo. Esto es tan sencillo como elegir a uno de los personajes antiguos, que será contactado por AkerJus y, ya retirado, le recomendará acudir a los personajes nuevos.
Una tercera opción puede ser una mezcla de ambas, con personajes antiguos y nuevos. Elegid la que mejor os encaje.
Una vez estén listos los personajes, llegará el momento de ponerles un poco en antecedentes, mientras se reproduce este tema: https://youtu.be/GMi7dNxsBho
En estos diez años, los personajes no habrán sabido nada de los dos chicos huidos, tampoco de su protectora. Los tres se desvanecieron y ninguno de ellos se puso en contacto. El grupo de juego tiene la posibilidad ahora de explicar cómo se libraron de los grupos violentos que andaban detrás de la documentación y de Buendía. Pueden haber negociado, los delincuentes pueden haber perdido el interés después de sacarle a Buendía una pasta… En cualquier caso, hace poco más de un año, Armería Buendía cerró indefinidamente, liquidando el stock y vendiendo el apetitoso local a un fondo inmobiliario. Nadie sabe qué ha sido del dueño, al que ya no se vuelve a ver por Cunia, y la armería se mantiene cerrada hasta el momento de comenzar esta segunda parte de la campaña, aunque hay rumores de que alguien, nadie sabe quién, pretende reabrirla.
Ana Machuca nunca volvió de Oslo, al contrario de lo que había pretendido. Cerró su propio negocio a distancia, traspasándolo a una cooperativa de vecinos de la zona que no tienen nada que ver con este asunto y que no fueron acosados por nadie en estos años.
Segunda estrofa:
A finales de abril, uno de los personajes de la primera parte de la campaña será contactado vía telefónica por una mujer que se hace entender en una mezcla de inglés y español ("hice el Erasmus en Salamanca"). Su nombre es Iren Danielsen, abogada del bufete AkerJus. Afirma ser la responsable del testamento de una mujer llamada Ana Machuca, recientemente fallecida en accidente de tráfico. Insiste en que en el testamento se menciona a este personaje y que para dar cumplimiento a lo establecido en el documento es necesario que acuda personalmente a Noruega, o que designe por poderes a alguien que lo haga en su nombre, español o noruego. Iren dice poder encargarse personalmente pero afirma que hay una disposición en el testamento por el que una parte del dinero se debe dedicar a traerle hasta allí, con lo que los gastos de esta persona quedarían pagados. El testamento menciona a otras personas y cualquiera de ellas podría ejercer esta representación (los personajes de la primera parte) pero solo se pagarán los gastos de una de ellas, aunque son todas bienvenidas. De hecho, les anima a venir. Reconoce que no hay una cantidad específica para ellos en el testamento, aunque sí que se les pide la gestión de ciertos intereses que podrían generar dinero, no está segura. En cualquier caso, si están dispuestos a ello, les enviaría billetes para todos (de los que uno les será reembolsado a su llegada a Noruega) al aeropuerto de Oslo-Gardermoen. Allí deberán alquilar un vehículo para desplazarse a la localidad histórica de Eidsvoll, donde tuvo lugar la Asamblea Constituyente que redactó la carta magna Noruega de 1814. La sede de AkerJus está en esa localidad.
Estribillo:
Bien, ¿qué ha ocurrido con los tres huidos durante estos diez años? Ana y los tres chicos se alojaron en la finca de un primo de ella, Julián Castro Machuca. Julián se casó dos décadas atrás con una empresaria noruega y juntos montaron la yeguada con la que organizan excursiones alrededor de la misma, cerca del Fiordo de Oslo. Allí se convirtieron en trabajadores de la yeguada mientras encontraban algo mejor. Aunque Noruega no es un país miembro de la Unión Europea, los ciudadanos de países miembros de esta no necesitan ningún permiso o visado para ir a vivir, estudiar o trabajar allí, solo informar a las autoridades de su presencia.
Ana decidió no volver ni siquiera temporalmente a España. Tras hablar con conocidos allí, supo de la reacción iracunda de su expareja, el señor Buendía, a su marcha y a la huída de los jóvenes. Eso le dio motivos de sobra para no querer aparecer y contratar a abogados que liquidaran lo suyo en Cunia sin dar datos de su paradero. Nieves y Ferrán, mayores de edad por los pelos, llamaron a sus familias y a la policía para confirmar que están bien, nada de secuestros o similares. También confirmaron no querer volver ni decir dónde estaban.
Con el paso de los meses, Ferrán y Nieves se fueron distanciando. La atracción que sentía Ferrán por su amiga no era correspondida y esta decidió ser la primera en romper con todo y buscar un nuevo trabajo en Noruega, desapareciendo de la vida de sus dos acompañantes, que no volvieron a saber de ella. Ana encontró trabajo como gerente de una empresa que contrataba trabajadores del sur de Europa y cada año se veía con Ferrán para comprobar cómo estaba. En cuanto al joven, terminó por quedarse a trabajar en la yeguada de Julián y su esposa Agnes.
Tercera estrofa:
Vamos a suponer que el viaje a Noruega, con preparativos, vuelo, alquiler de coche y desplazamiento hasta Eidsvoll no tiene más problemas que los que los personajes o el azar generen. Los noruegos resultan una gente seca pero educada que darán pocos problemas a unos turistas que llegan en plena primavera. Las temperaturas que se encontrarán los personajes en esta zona durante su visita oscilan entre los 7 y los 20 grados. El cielo estará nublado con frecuencia pero lloverá muy ocasionalmente.
Eidsvoll es un municipio disperso que agrupa varios núcleos de población, entre los cuales suman más de 20.000 habitantes. El mayor de estos núcleos es Sunset, centro administrativo del municipio y donde se encuentra el bufete de abogados AkerJus.
Imagen de Leif Knutsen (2005). "Center of Eidsvoll (Sundet)". Licencia Creative Commons Atribución-Compartir Igual 3.0.
El despacho ocupa la bien iluminada planta baja de un edificio de tres pisos y la persona que atiende en la recepción no necesita ni preguntar sus nombres; según les ve entrar, avisa a Iren Danielsen. Esta abogada, de rubio pelo corto, ojos azules, rostro redondo y entrada en los cuarenta, les llevará hasta un despacho donde podrán hablar con privacidad.
Podrá darles algunos detalles más sobre el fallecimiento de Ana, si es que no se lo preguntaron por teléfono. El accidente tuvo lugar hace dos semanas. Al parecer, Ana estaba conduciendo en dirección al norte desde Oslo, por lo que es muy probable que se dirigiera precisamente a este despacho. Era de noche y, según la policía, las marcas en el suelo helado demostraban que un coche la sacó de la carretera al intentar adelantarla. El vehículo de Ana volcó al salir por un terraplén y chocó contra un árbol. Se cree que Ana no murió en el acto pero sí pocos minutos después del golpe, mucho antes de que nadie la pudiera socorrer, excepto el ocupante u ocupantes del otro coche. El vehículo causante del accidente también chocó contra un árbol más adelante, pero de manera mucho más grave, pues pudo arrancar de nuevo y marcharse sin más. El coche de Ana lo descubrió una quitanieves que volvía de limpiar caminos secundarios y para entonces el cuerpo ya estaba frío.
La policía no tiene pistas de quién pudiera ser el delincuente (se convirtió en uno al no auxiliar a la accidentada y huir), solo que el vehículo era de color blanco, posiblemente un SUV, seguramente de las marcas Toyota o Volvo. Ninguna agencia de alquiler ha informado que les fuera devuelto un vehículo dañado de tal manera que resultara sospechoso. Han preguntado en talleres de la región, también sin éxito.
Toda esta información la ha obtenido a través del único familiar de Ana en Noruega, Julián Castro Machuca, al que las autoridades han ido informando.
¿Y qué dice el testamento? Ana, que ha muerto sin hijos y soltera, ha legado todos sus ahorros y su casa en Oslo a su primo Julián, con algunas excepciones. Para empezar, una cierta cantidad de dinero se la ha legado a un tal Ferrán Torres, al que ya se le ha comunicado y con el que están resolviendo el papeleo. La otra excepción es una tal Nieves Buendía, a la que ha legado su casa en Cunia. No se ha conseguido localizar a Nieves pero si en esto pudieran ser de alguna ayuda…
Respecto a ellos, lo que pide el testamento es que se hagan responsables de gestionar cierta documentación que se encuentra en un guardamuebles de Oslo. Según el testamento, ellos serían las únicas personas que sabrían sacarle partido, signifique lo que signifique eso.
El problema es que el guardamuebles no permitirá el acceso a nadie distinto de Ana hasta que se termine el papeleo, incluyendo la aceptación de la herencia por parte de ellos. Tiene allí alguna documentación que pueden ir firmando y, según dice, en dos o tres días laborables, estará lista. Pueden aprovechar para visitar Noruega.
Una TA de Derecho con un grado de dificultad (está en noruego, traducido a inglés y español pero hace referencia a normativas noruegas con las que no estarán familiarizados) revelará que la documentación es correcta. Si los dados de calidad obtienen un resultado de 5 o mayor, caerán en que esta documentación se podría haber enviado online y firmado a distancia para acelerar las cosas, y que estuviera todo listo al llegar aquí.
Además, una TA de Psicología les puede llevar a percibir que Iren sabe más de lo que dice. Si se le pregunta por ello lo negará, aparentando absoluta inocencia. Ella ya ha cobrado, dice, ¿por qué iba a querer entorpecer nada? Si se empeñan en interrogarla les pedirá que se marchen y que a partir de ese momento hagan todas las gestiones con ella vía telefónica para evitar malentendidos que perjudiquen a cualquiera de las partes.
En algún momento de la conversación, cuando uno de los Pjs haga una pregunta que Iren no parezca querer responder, pregúntale qué puntuación tiene en Dialéctica y haz una TA oculta. Con independencia del resultado, haz que Iren insinúe que sabe que hay cosas en esta situación que les sonarán raras, a ella también, pero que probablemente solo Ana o alguno de sus herederos sabría más del tema. Si los personajes piden sus contactos, Danielsen no tendrá problema en darles la dirección de la yeguada de Julián Castro, donde sabe que también trabaja Ferrán Torres. No tiene ningún contacto de Nieves Buendía.
Si no se llegase a dar esta oportunidad de meter la sugerencia en respuesta a una pregunta, Iren se arriesgará a hacer el comentario justo cuando se estén marchando. Una TA de Psicología serviría para darse cuenta de que es algo que no se le ha ocurrido de manera espontánea sino que tenía pensado hacerlo. De nuevo, interrogarla más sobre ello o usar Intimidar no dará nuevos resultados, dado que puede limitarse a pedirles que se marchen.
Cuarta estrofa:
Después de buscar alojamiento en la zona (Iren les recomendará el Eidsvoll Express Hotel, a unos 10 kilómetros) y descansar, es posible que los personajes quieran planear una visita rápida a Ferrán y Julián. La yeguada está en un terreno a las afueras de Hurum, una municipalidad al sur de Oslo y a 125 kilómetros de Eidsvoll. En un par de horas estarían allí.
Si los personajes son los mismos que jugaron la primera parte de esta aventura, tendrán una sensación de deja vu cuando se dirijan de nuevo por carretera hacia una yeguada para buscar a unos desaparecidos. En este caso el entorno difiere mucho del de la Sierra de Irta. La carretera que les llevará hasta allí va a lo largo de la costa del fiordo de Oslo, ocasionalmente cruzándolo. El paisaje ofrece poblados dispersos de casitas de colores, bosques bajos, muelles y la vista del fiordo serpenteando, con embarcaciones, la mayoría de recreo, circulando por él.
Imagen de Jim G (2006). "Good Morning Oslo Norway!". Licencia Creative Commons Atribución 2.0 Genérica.
Tras pasar un camping de playa los personajes dejarán la carretera principal al encontrar el primero de los carteles que indica "Ridesenter Tre Fresnoene" ("Centro Ecuestre Tres Fresnos"). Desde ahí cogerán una pista forestal que avanza hacia el interior algunos kilómetros, antes de encontrar el segundo de los carteles que señala hacia un camino. Este se adentra en el bosque apenas doscientos metros antes de llegar a la cerca de madera que rodea la propiedad, donde un tercer cartel les confirma que han llegado.
Al otro lado de la valla el bosque se limpió al crear el centro ecuestre, de tal manera que casi todo son campos abiertos con pistas de tierra y hierba para entrenar con los caballos la doma, el trote y los saltos. En el centro del terreno hay una casa roja de madera, de dos plantas, con un edificio de cuadras anexo y lo que parece una cochera algo más allá. Junto a la casa se han dejado sin talar los tres fresnos de buen tamaño que dan su nombre al lugar.
Una TA de Escuchar revelará que el lugar está en silencio, más de lo esperable. No se ve a nadie trabajando, no se escuchan voces ni aparatos electrónicos o golpes de tareas campestres… Una TA de Descubrir revelará huellas recientes de un vehículo todo terreno que ha entrado y se ha marchado. Hay huellas de otros vehículos que entran y salen con asiduidad del recinto pero esas son las más recientes.
Sin duda los personajes se olerán una trampa o similar, por lo que debes dejarles moverse por el recinto escondiéndose y en silencio si así lo desean, haciéndoles tirar por Esconder y Sigilo las veces que creas necesarias, aunque en el recinto no hay nadie que les vaya a ver mientras acceden a la casa.
En algún momento, alguno de ellos abrirá una ventana o una puerta. En ese momento pídele una TA de Alerta. Si no la pasa y entra en el edificio, el siguiente personaje podrá tirar y así sucesivamente hasta que alguien pase la tirada o uno de ellos accione un interruptor de la luz.
Si cualquier personaje pasa la tirada, detectará de inmediato el olor a gas que inunda el lugar. Sin duda eso será suficiente para no encender ninguna luz eléctrica y preferir moverse con la que entre a través de las ventanas, además de querer abrir algunas de estas, sin duda.
Al registrar la casa verán que la planta baja consta de una sala principal muy grande que se divide en comedor y salón. Del comedor se pasa a una cocina y del salón a un baño y a un dormitorio de invitados. De la cocina se pasa a una salita de servicio con lavadoras y acceso a la puerta trasera. También desde ahí se accede a un taller y almacén de herramientas.
En la cocina es donde el gas proveniente de una caldera exterior está abierto. Ahí mismo se puede cerrar la llave de paso. En el taller es donde es posible encontrar a la única persona que queda en el recinto, Ferrán. Difícil de reconocer por haber engordado bastante en estos años y haberse dejado el pelo largo, Ferrán está tirado en el suelo, inconsciente o muerto.
Una TA de Medicina será necesaria para salvarle la vida. La TA tendrá un nivel menos de dificultad si se han abierto rápidamente las ventanas para ventilar aquello y un nivel más de dificultad si se tarda demasiado en comprobar si está vivo o muerto.
¿Y qué ocurre si algún personaje enciende un interruptor con el gas encendido? La Dirección de Juego tirará en ese momento 1d10. Si el resultado es 1, 2 o 3, aquello explotará. Quien esté dentro de la casa en ese momento sufrirá daño tipo IV y desde luego Ferrán morirá. El daño se reducirá en entre 1 y 6 puntos por localización dependiendo de lo lejos que esté el personaje en ese momento de la cocina, muebles que haya en medio, etc.
Cuando el humo se disperse, cuando se determine que Ferrán ha muerto o en el momento en que empiece a respirar de nuevo, daremos por terminado este capítulo, en medio del silencio del campo, inundados de cierta paranoia, mirando alrededor a la espera de que algo aún peor esté por llegar. Mientras preparáis la siguiente sesión, repartís experiencia, etc, puedes volver a utilizar el tema de salida habitual de esta serie: https://youtu.be/jz9GJENqwMo
Coda
Ahí estaba, una carpeta color manila de aspecto inocente. En su interior aguardaba algo más de lo que esperaban. El último de los dolores, el mayor de los pesos para el alma, lo que quedó en el fondo de la caja de Pandora.