Jion Mater fue uno de los más grandes exploradores de la época del Emperador y gracias a él se conocieron muchos caminos, culturas y pueblos de Eriloe. Se podría decir que fue el primer explorador que ejerció su profesión como tal. Hasta ese momento la exploración estaba patrocinada por cuestiones económicas (rutas comerciales) o militares, pero él se dedicó a la exploración con el único objetivo del conocimiento. Ese es el espíritu de la Sociedad Cartográfica que lleva su nombre, aunque no hay ni hubo relación alguna entre los fundadores y el famoso explorador.
La Sociedad Cartográfica tiene en sus filas a un montón de aventureros que van tomando nota de los caminos y detalles relevantes de sus viajes. Toda la información se recopila y se va añadiendo a mapas cada vez más detallados con los que la Sociedad elabora cuidados y hermosos originales que luego reproduce y vende a comerciantes, gobiernos y otras hermandades. Los aventureros reciben dinero a cambio de sus informaciones cuando estas son verificadas por la sociedad y aunque no es una fuente de ingreso de la que vivir (afortunadamente los aventureros tienen otras formas de ganar dinero) es un ingreso que puede sacarte de un apuro en las malas épocas. No todos se molestan en aportar información a la Sociedad, pero los que lo hacen reciben a cambio el apoyo, a modo de mapas e indicaciones, de los miembros de la S. C. Mater.
Naturalmente, la información no es siempre fiable y por eso no se paga hasta que esta no es confirmada por un segundo grupo de aventureros o un enviado de la Sociedad (a veces organizan expediciones para aclarar problemas cartográficos). Los grupos de aventureros tienen, podríamos decirlo así, una cuenta en la organización y cada vez que un dato se comprueba le abonan la cantidad establecida por haber participado en la elaboración del mapa. Ese dinero se puede cobrar en efectivo o se pueden obtener mapas a cambio. Muchos grupos prefieren usarlo con este fin para no ir a ciegas por los nuevos territorios.
La Sociedad Cartográfica tiene agentes en muchas ciudades, incluso las de pequeño tamaño, y oficinas en las grandes ciudades. Se puede dar la información a los agentes e, incluso, se puede recibir de ellos si lo que se busca es información de la zona donde está el agente. Si se busca información de lugares más lejanos, habrá que ir a una oficina. En dichas oficinas pueden trabajar un gran número de cartógrafos y copistas que actualizan los dos mapas originales de cada zona de forma continua. Hay dos mapas de cada zona por motivos logísticos: uno de ellos se queda siempre en la oficina y el segundo es el que se llevan cuando viajan de una oficina a otra para intercambiar datos y actualizar los existentes. De hecho, cuando el segundo mapa de la zona hace el recorrido completo, todas las oficinas tienen el mapa actualizado. Esta tarea puede llevar años.
Cuando alguien solicita un mapa, los copistas los elaboran partiendo del original. Si es un mapa de una zona pequeña (los alrededores de una villa), pueden tardar uno o dos días, pero si es un mapa más grande: una comarca o todo un valle, tardarán una semana. Afortunadamente siempre tienen copias de los lugares más solicitados (como mapas de las ciudades).
La estructura de la sociedad es bastante piramidal y tiene su sede central en un enorme y lujoso edificio de la ciudad de Ôs. Desde ella se enlaza con los diferentes sedes de cada nación y desde estas con las diferentes oficinas de cada ciudad y desde allí con los agentes de la zona, quienes acuden a las oficinas más próximas para dar y recibir los nuevos datos cartográficos.
Dicen que en la sede central de Ôs hay un mapa con las corrientes de aire del Vacío. Un mapa elaborado con las aportaciones de marineros y capitanes durante decenas de años y que se guarda con celo pues su conocimiento podría desequilibrar la frágil economía mercantil del mundo conocido. Otro de los secretos que guarda la Sociedad es el conocimiento de que Eriloe es redondo y que si se navega hacia el norte, se vuelve por el sur. Hay cierta insinuación a ello en el logotipo de la sociedad, donde aparece el tercer continente que poca gente conoce, pero este doble sentido no ha sido entendido hasta la fecha.