Número: 162. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
Los paracaidistas alemanes eran, por preparación, una de las unidades de élite de las fuerzas alemanas, pero no pertenecían al ejército sino a la aviación (a la Luftwaffe). Su nombre significa "cazador paracaidista", aunque jäger (cazador) hace referencia al nombre de las unidades de élite del ejército de Prusia (antes de la Segunda Guerra Mundial). En unas maniobras conjuntas con la Unión Soviética, Goering vio en acción a los paracaidistas rusos y decidió que las Luftwaffe necesitaban unas tropas como aquellas. Entre 1935 y 1938 se irían incrementando el número de tropas y perfeccionando el entrenamiento hasta conseguir completar la 1ª división paracaidista. Esta sería la única división paracaidista en la época que nos ocupa (llegaría a haber 10 divisiones pero la mayoría solo fueron paracaidistas de nombre).
La 1ª división paracaidista participó en la campaña de Noruega con resultados variados: capturaron la base aérea de Sola, pero fueron derrotados en el cruce de ferrocarriles de Dombås. Más tarde realizarían el exitoso y famoso asalto a Eben Emael (fortificaciones belgas donde se impusieron a sus 1200 defensores) y apoyaron otras operaciones para capturar puentes y puntos clave. Si bien desorganizaron las líneas holandesas, fallaron a la hora de capturar La Haya lo que, creían los alemanes, forzaría la rendición del país. Sería las tropas de tierra quienes lo conseguirían.
A pesar de los inequívocos éxitos de los paracaidistas alemanes en estas operaciones iniciales de 1940, la rápida evolución de la batalla de Francia impediría organizar operaciones y los paracaidistas tendrían que esperar una nueva oportunidad hasta 1941: la batalla de Creta (de la que hablaremos en el futuro).
El entrenamiento de las unidades y su comportamiento en el campo de batalla estaba a la altura de las unidades de las que derivaba su nombre.
A diferencia de otras unidades alemanas, las escuadras paracaidistas de 1939 estaban formadas por 12 hombres. Esto es así porque 12 era el número de soldados que entraban en un Ju-52, el avión que los transportaba a su destino. Su composición era:
- Un sargento armado con pistola Luger y subfusil.
- Un cabo (o sargento de menor graduación que el anterior) armado con pistola Luger y subfusil.
- 4 soldados en dos dotaciones de ametralladora MG34. Los cuatro con pistola, tiradores y auxiliares (uno llevaba la ametralladora y el otro la munición de esta).
- 6 soldados con pistola y fusil Kar 98.
Todos los miembros de la unidad llevaban pistolas porque la unidad saltaba del avión sin sus armas, solo con las pistolas. Las armas principales, pesadas y la munición iban en unos cajones que también se lanzaban en paracaídas. Cuando llegaban al suelo, los paracaidistas sólo tenían las pistolas para defenderse hasta que recuperaban las cajas y se armaban en condiciones.
El FG42, el arma de los paracaidistas alemanes, no estaba disponible en esta época (habría que esperar a 1942) y tampoco fue muy numerosa.