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TRA ghar
Hace millones de años, antes de que consiguieran dejar atrás sus cuerpos físicos, los ghar usaban este dispositivo para curar rápidamente sus lesiones y para prolongar sus vidas más allá de lo naturalmente posible. Con su evolución en seres inmortales, los TRA cayeron en desuso, puesto que ya no les servían para nada.
Los TRA volvieron a ser utilizados justo antes de la gran guerra Ghar, cuando el colectivo que más tarde sería conocido como los skardar comenzó a cultivar una relación de patronazgo con las nuevas razas que germinaban a lo largo y ancho de la galaxia. A menudo, muchos de los skardar eligieron darse a conocer a estas especies bajo la apariencia de benevolentes seres divinos, dispuestos a guiarles hacia su ulterior desarrollo. Para darse a conocer a estas especies, los skardar solían recurrir a individuos nativos particularmente carismáticos, a los que mejoraban genéticamente para que actuasen como heraldos y profetas. Si el sujeto hacía bien su trabajo, lo normal es que los skardar lo mantuvieran con vida el mayor tiempo posible, prolongando su vida para sacar el máximo provecho a su agente.
El TRA ghar funciona de forma idéntica a un TRA estándar (ver pág. 322 del manual básico). Básicamente se trata de un tanque lleno de tejido proteínico que contiene una combinación de biolíquidos y microbots que permiten tratar a pacientes con heridas muy graves o amputaciones. Un TRA ghar permite la recuperación de un herido en una cuarta parte del tiempo normal, sin que además suponga un choque traumático para el paciente (que no sufre pérdida alguna de puntos de mente). De hecho, el TRA ghar es tan efectivo que el usuario recupera todos sus Puntos de mente en una sola noche, lo que provoca una sensación inmensamente placentera y euforizante que muchos sujetos confunden con un "éxtasis divino".
La inmersión regular en el TRA ghar también sirve para detener temporalmente el envejecimiento de los seres orgánicos, pudiendo ser usado para postergar la muerte del individuo casi indefinidamente. Cada noche pasada en el interior del TRA ghar retrasa el envejecimiento durante 1d10 semanas. La parte negativa de esto es que los sujetos que abusan del mismo no tardan en desarrollar una adicción psicológica a los efectos euforizantes antes citados. Adicionalmente, el TRA ghar también puede ser usado a modo de cámara criogénica, de modo que el usuario puede mantenerse con vida en su interior de modo indefinido. Sin embargo, lamentablemente el TRA ghar fue concebido para adaptarse específicamente al organismo de los antiguos ghar, por lo que los miembros de otras especies desarrollan efectos secundarios indeseados a largo plazo: por cada medio siglo (más o menos) de uso frecuente, el sujeto pierde un Punto de mente (de modo irrecuperable), desarrollando paulatinamente algún tipo de enfermedad física o mental: alucinaciones, descalcificación ósea, psicopatía, albinismo, paranoia, megalomanía, porfiria, esquizofrenia, fotofobia, personalidad múltiple, etc.; a cada individuo le afecta de forma distinta. Cuando los Puntos de mente del usuario llegan a cero, el sujeto enloquece irremediablemente.
El TRA ghar pesa unos 400 kilos de peso. Está fabricado en el mismo material empleado en las carcasas de los robots iroiendi, lo que otorga una protección 10/10 a todo lo que esté en su interior. Para funcionar debe estar conectado a una batería eterna ghar.
La capacidad del TRA ghar de generar calor o frío extremo hace que pueda ser empleado para encerrar y transportar a un ghar dentro de él, manteniéndolo en letargo a temperaturas cercanas al frío absoluto. El TRA ghar también puede ser usado para torturar o matar al ocupante; para ello se le va drenando lentamente la vida en un agónico y extremadamente doloroso procedimiento inverso a la curación natural que puede prolongarse indefinidamente (acompasándolo con su ritmo de curación natural). Como se ha dicho, el TRA ghar puede también generar un calor extremo, incinerando instantáneamente todo lo que contenga en cuestión de microsegundos (los ghar son inmunes a este efecto).
Se desconoce cuántos TRA ghar siguen existiendo, aunque probablemente no sean demasiados. Los iroiendi lo veían como otra de las absurdas concesiones de los skardar a unos seres inferiores que no merecían un don tan precioso como el de la inmortalidad, por lo que destruyeron casi todos. Sin embargo, algunos de ellos han sido conservados como reliquias artísticas de su pasado. Vardial dispone de docenas de ellos, e incluso el mismísimo Nor, tan despectivo con las especies inferiores, tiene al menos uno en su poder. También es posible que aún queden algunos perdidos y olvidados en los ruinosos monumentos ghar que existen en el sector Alfeirón, pero de ser así estarán custodiados o bien habrán sido olvidados incluso por seres de memoria tan larga como los iroiendi. La existencia de los TRA ghar son un descubrimiento reciente para los servicios de Inteligencia de la galaxia, los cuales ansían hacerse con esta tecnología. El SSR cree que Ceimar dispone de, al menos, uno de estos TRA ghar, y que Kennell se ha visto obligado a usarlo al menos en dos ocasiones, aunque lo mismo se rumorea de Neuro, líder de la Fa.Ra.Li., que habría recibido uno como obsequio personal por parte de los iroiendi. Por último, hace un tiempo que se viene rumoreando que Francis Hegaton, el legendario presidente de la corporación homónima, podría no estar criogenizado tal y como afirmaba la leyenda en torno a su persona, sino que seguiría vivo y en activo gracias al profuso uso de un TRA ghar descubierto hace siglos por la división xenoarqueológica de su empresa.