Exo – Bomba de Frio

Al final de la guerra verriana, Badotec, una empresa de suministros militares ya desaparecida, invirtió en el desarrollo de una bomba de frío. Existía la creencia de que el frío perjudicaba más a los verrianos que a los humanos y que si se conseguía enfriar mucho un espacio reducido, su velocidad y agilidad en gravedad cero se perdía. El concepto era realizar un equipo portátil que fuera capaz de absorber el calor que le rodeaba en pocos segundos.

Bomba de frío, imagen de dominio público de PeteLinforth

El proyecto fracasó. La razón principal es que los verrianos no se veían afectados por el frío como la empresa supuso. Además, técnicamente el proyecto tenía mucha complejidad y no funcionaba bien en ambientes sin atmósfera. Tras varios millones de estándar invertidos, el proyecto se canceló.

Años después, ya terminada la guerra, Higia Cop. se interesó por la idea y adquirió las investigaciones de Badotec para desarrollar su propio producto. El objeto de Higia no era desarrollar un arma sino un electrodoméstico de uso urbano. Pocos años después sacaron al mercado el SEP-1, un sistema de enfriamiento portátil.

El la actualidad se está comercializando desde el SEP-10 al SEP-25. A diferencia del primero modelo, el número ha pasado a indicar la capacidad de enfriamiento. Una unidad SEP es capaz de bajar la temperatura 10º centígrados durante diez horas en un volumen cúbico igual al número del producto. Es decir, el SEP-24 mantendrá fresca una habitación de 12 metros cuadrados aproximadamente. La empresa advierte que utilizar varios SEP en una misma habitación o utilizar SEP de mayor tamaño en espacios pequeños puede provocar enfriamientos excesivos y que debe controlarse la temperatura ambiental en el primer uso. En entornos especialmente calientes, como oficinas con servidores EPR, los SEP se utilizan como recursos de ventilación de emergencia. También es un recurso valioso en excursiones y viajes a entornos no explorados.

El funcionamiento del SEP es sencillo. En el interior tiene un núcleo formado por un gel con una gran capacidad de absorción calorífica rodeado de varillas metálicas en forma de esfera con gran capacidad para transmitir el calor. Cuando el SEP se coloca en una habitación y se activa, el gel empieza a absorber calor de su alrededor, enfriándolo. La duración, 10 horas, es estimada para un entorno de unos 30 grados. Si la temperatura ambiental es superior, la duración del SEP será menor, aproximadamente 15 minutos menos por cada grado en exceso.

Los SEP son bastante baratos (entre 5 y 10 estándar), pero son de un solo uso. La compañía, sin embargo, comercializa unos recargadores para los enfriadores que se llaman RESEP y que, en resumen, son un congeladores diseñados para extraer el gel del SEP, enfriarlo mucho y volver a introducirlo en el mecanismo. El tiempo de recarga es de una hora, pero el aparato es caro, unos 500 estándar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *