Autor: Sergio Jurado
Aunque normalmente se encuentran en solitario, algunos viajeros afirman haber visto bandadas de Hegam-Utukku trazando círculos a gran altura. Se rumorea que se alimentan de tierra seca aunque resulta improbable que esto sea cierto.
Sin duda, su más asombrosa particularidad consiste en que, bajo el sol, en vez de proyectar la sombra de su figura, proyectan la de un ser humano. De este hecho, algunos sabios concluyen que los Hegam-Utukku son en realidad espíritus de personas que murieron lejos de la protección de los dioses.
Son enemigos de los seres humanos y los atacan en cuanto los ven. Cuando logran matar a un hombre se revuelcan en la sangre de su víctima e, inmediatamente, su sombra obedece a su cuerpo y alcanzan el favor de los dioses, tras lo que huyen volando hacia las alturas para no volver a ser vistos.