Hace tiempo, no tanto, pero así parece más lejano, la organización de producción editorial de Sombra era un caos. Demasiados proyectos, demasiadas ideas y pocas manos. Saltábamos de un proyecto a otro de forma caprichosa y perdíamos más tiempo tratando de ponernos al día de lo que habíamos hecho que avanzando. Todos los proyectos eran (y son) interesantes, pero no éramos efectivos porque esos saltos creativos obedecían a cuestiones muy subjetivas: ánimos personales, películas o series recién vistas, algún comentario en redes sociales, etc.
Detectar el problema fue fácil, pero tratar de solucionarlo requirió bastante terapia, reuniones y decisiones. Así nacieron los cuatro escalones.
Ediciones Sombra solo trabaja en cuatro proyectos de forma simultánea y cada uno de ellos está en una fase de desarrollo diferente: escritura, corrección, ilustración o maquetación. De ahí lo de los cuatro escalones: cada proyecto en un escalón y un escalón para cada proyecto. En la práctica esto es un poco más complejo porque los proyectos suelen estar casi escritos cuando entran en la escalera y porque no hay una sola fase de corrección sino, al menos, dos (pero generalmente cuatro). Lo importante es la idea: que no se junten dos proyectos en la misma fase y que no nos salgamos de esos cuatro proyectos en el trabajo editorial diario.
La revista Desde el Sótano no está incluida en este criterio; funciona bien, mejor no tocarla. Y tampoco incluye, claro está, a los autores que pueden seguir trabajando y desarrollando lo que consideren. Este criterio afecta a la editorial, exclusivamente. Sombra solo trabaja en 4 proyectos a la vez. Claro, la siguiente pregunta será: ¿cuáles son esos 4 proyectos?
Sistema Sombra Corpus. Se trata de un libro básico con las reglas del Sistema Sombra, pero el objetivo del libro es algo más ambicioso. Pretendemos que jugadores y, sobre todo, directores, conozcan las razones de las decisiones tras el sistema y que los creadores se animen a crear aventuras y juegos con el Sistema Sombra. Además, tras el Corpus, el sistema será liberado (con una fórmula que estamos estudiando) para que otras editoriales y creadores puedan utilizarlo también. En la actualidad está en la corrección final y le queda maquetación y algo de ilustración.
Gotterdammerung. Es una aventura ambientada en la primera mitad del siglo XX y que ha sido adaptada (ya estaba escrita) al Sistema Corpus. Se trataría de la primera aventura para este sistema. Está pendiente de pasar a corrección, pero el tema ilustración está terminado.
Operación Frankton. Se trata de una «misión» para Comandos de Guerra que propone una nueva forma de afrontar estas partidas. Es histórica, pero incluye la planificación de la operación. Está en escritura y ya explicaremos qué es esto de las misiones cuando esté más cerca la publicación.
Indalo. Un juego de grupos de superhéroes del que nos habréis oído hablar en alguna ocasión e incluso hemos hecho algunas partidas en jornadas. Su autor está terminando ya la escritura y pasará en breve a la primera corrección (la editorial) y empezaremos a ilustrarlo. La portada ya la tenemos.
El orden de lanzamiento es el que he expuesto (los escalones están ordenados), pero las circunstancias pueden hacer que cambie (por ejemplo, Indalo parece más cercano a su publicación que Frankton aunque, en teoría esté va antes). Cuando un libro abandona la escalera (porque lo publicamos), entonces decidimos cual es el cuarto título que metemos. Por ejemplo, cuando publicamos Exodossier: agakals, entró Indalo en la escalera.
El objetivo de esta entrada era dar a conocer cómo estamos trabajando y por qué de algunos proyectos no estamos informando en este momento. No los hemos abandonado (los autores siguen trabajando en ello), pero ahora solo comentamos cosas de los títulos que están en la escalera. Es una forma de poner un poco de orden al caos que teníamos. Y, entre nosotros, parece que está funcionando.
Muy interesante. Creo que esta técnica de los escalones puede aplicarse a otros ámbitos. Con ganas de ver Operación Frankton.
Gracias por comentar. La verdad es que no creo que hayamos inventado la rueda y estoy seguro que hay alguna técnica de organización similar con algún nombre más rimbombante. En nuestro caso, como autodidactas en esto de aprender a organizarnos, le hemos puesto un nombre fácil de recordar 🙂