Número: 136. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
En este artículo hablaremos de los destructores alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. A diferencia de artículos anteriores de esta serie y debido al número de destructores no podremos detenernos mucho en cada uno de ellos, pero hablaremos de todos los tipos.
En el Tratado de Versalles, Alemania tenía permitidos 12 destructores, pero la propia armada alemana los clasificaba como buques torpederos. Cuando quedó claro que el Tratado de Versalles no era estricto y que los alemanes podrían saltárselo, se plantearon construir su flota de destructores. La armada aceptó un novedoso sistema de propulsión de alta presión que había sido probado en algunas naves de menor tonelaje previas. Sobre el plano, los nuevos motores eran excepcionales, pero nunca llegaron a funcionar al 100% y los destructores alemanes sufrían, en ocasiones, misteriosas averías fruto de un material de fabricación de menor calidad y de una maquinaria compleja en exceso. Los destructores nunca alcanzaron las prestaciones previstas.
Alemania inició la Segunda Guerra Mundial con sólo 21 destructores operativos y casi la mitad de ellos se perdieron en la batalla de Narvik contra la flota británica. La reposición de estas pérdidas y el crecimiento de la flota de destructores fue muy lento ya que la armada tenía otras prioridades, como los submarinos. Por otro lado, Alemania dio nombre a algunos destructores, pero no a todos y la mayoría sólo tienen su nombre en código (una Z y un número o ZH, ZF y ZG y un número).
Con el avance de la guerra y la presencia cada vez mayor de la fuerza aérea, los destructores se fueron modificando para darles, cada vez más, armamento antiaéreo. Esto se realizaba sustituyendo algún arma presente por otra u otras en montaje paralelo o cuádruple. Además, los destructores llevaban un radar FuMO 21, pero fue cambiado por la versión mejorada FuMO25 en los últimos modelos. Así mismo, todos los destructores podían operar como dragaminas.
Cuatro destructores forman esta clase: Z1 (Leberecht Maass), Z2 (Gerog Thiele), Z3 (Max Schultz) y Z4 (Richard Beitzen. Entraron en servicio a principio de 1937 y forman la estructura básica de todos los destructores que vendrían después.
Desplazaban 3156 toneladas y tenían 119,30 metros de eslora y 11,30 metros de manga. Alcanzaban los 38 nudos e iban armados con 5 baterías de 127 mm, 4 de 37 mm, 4 de 20mm y dos montajes cuádruples de lanzatorpedos. Su dotación era de 315 tripulantes.
Los tres primeros fueron hundidos en Noruega (entre febrero y abril de 1940) y el Z4 sobrevivió a la guerra y pasó a manos británicas al finalizar la contienda.
Una versión mejorada del anterior, ligeramente más largos (2 metros) que entraron en servicio entre 1937 y 1939 y de los que se construyeron 12 (del Z5 al Z16).
El Z5 (Paul Jacobi) y el Z6 (Theodor Riedel) sufrieron varias modificaciones en el casco y la cubierta en 1942, sobrevivieron a la guerra y fueron transferidos a Francia en 1946 tras permanecer unos pocos meses en manos británicas. El Z7 (Hermann Schoemman) fue hundido en Junio de 1942 tras un combate con un crucero británico tras un ataque a un convoy. Similar suerte tuvo el Z16 (Friedrich Eckoldt), pero en diciembre de ese mismo año. El Z8 (Bruno Heinemann) se hundiría al chocar con una mina al principio de este mismo año.
El Z9 (Wolfgang Zenker) se hundió en abril de 1940 en la Campaña de Noruega. Lo mismo les ocurrió al Z11 (Bernd von Arnim), al Z12 (Erich Giese) y al Z13 (Erich Koellner). Los dos primeros quedaron embarrancados en Rombaksfjord y el tercero se hundió en Djupvik.
El Z10 (Hans Lody) sobrevivió a la guerra, fue cedido a los británicos quienes lo mantuvieron en servicio hasta 1949. Destino similar sufrieron el Z14 (Friedrich Ihn) y el Z15 (Erich Steinbrinck) pero en manos soviéticas. El primero fue desmantelado a principios de los años 50 y el segundo aguantó hasta 1954.
Estos seis destructores entraron en servicio en 1938 y 1939 y presentaban unas ligeras mejoras respecto a las clases 1934. Una de esas mejoras estaba en la proa del barco y el diseño se convertiría en estándar de las siguientes clases de destructores (incluso alguno de los previos fue modificado con el nuevo diseño).
Desplazaban 3415 toneladas y tenían 123 metros de eslora y 11,80 metros de manga. Alcanzaban los 40 nudos y sus motores y su armamento era similar al de la clase 1934, excepto que los motores tenían más potencia (y daban más velocidad) y que llevaba 7 (en vez de 4) cañones de 20 mm. Su dotación era de 313 tripulantes.
Cinco de los seis barcos se perdieron en Narvik: El Z17 (Diether von Roeder) hundido en el puerto, el Z18 (Hans Lüdelmann) hundido en Rombaksfjord, el Z19 (Hermann Künne) quedó embarrancado en Herjangsfjord y sus restos no serían desmantelados hasta 1963 y el Z21 (Wilhelm Heidkamp) y Z22 (Anton Scmitt) hundido en Narvik. El único superviviente de esta clase en Noruega, el Z20 (Karl Galster) sobreviviría a la guerra y sería cedido a la URSS.
Ocho buques forman parte de esta clase, del Z23 al Z30. Eran una versión mejorada de clase 1936 con armamento más pesado (de 150 mm) y ligeramente más largos. La torreta de los 150 mm eran muy pesada y la munición del cañón daba muchos problemas durante la carga en combate. A la armada no le gustó el resultado y no volvió a instalar este cañón en los destructores de nueva fabricación. Algunas clases los mantuvieron porque ya estaban en construcción.
Su velocidad se redujo a 38 nudos. Casi todos formaron parte de la 8ª Flotilla de Destructores con base en Narvik entre diciembre de 1940 y agosto de 1944 y muchos se perdieron en misiones contra convoyes o en batalla contra la armada británica. Cuatro sobrevivirían a la guerra: el Z23 que fue desmantelado en 1948, pero que llevaba en reparaciones desde finales de 1944 por culpa de una bomba lanzada por la RAF, el Z25 que fue entregado a Francia en 1946 previo paso por la armada británica, el Z29 que fue desmantelado utilizado por los estadounidenses para hundir una carga de municiones de gas venenoso a finales de 1946 y el Z30 que fue transferido a Gran Bretaña en 1945, lo utilizaron para hacer pruebas de explosivos y finalmente se hundió.
Fruto de un programa de movilización especial (de ahí el "mob") surgieron los siete destructores de esta clase, del Z31 al Z34 y del Z37 al Z39. Inicialmente sólo iban a ser 4 destructores, pero la cancelación de algunos programas de construcción conllevó el aumento a siete. De ahí el salto en la numeración. Entraron en servicio entre abril de 1942 y agosto de 1944.
Desplazaban 3597 toneladas y tenían 127 metros de eslora y 12 metros de manga. Alcanzaban los 38 nudos e iban armados con 5 baterías, una gemela y tres individuales, de 150 mm (las que habían dado problemas en la clase 1936A), 2 de 37 mm en montaje gemelo, 10 de 20mm (2 cuádruples y 2 individuales) y dos montajes cuádruples de lanzatorpedos. Su dotación era de 321 tripulantes.
El Z31 fue requisado por los británicos al final de la guerra, transferido después a los franceses quienes hicieron algunas mejoras y lo mantuvieron en servicio hasta 1958. No sería su final porque lo utilizaron como objetivo flotante hasta los años 60. El Z32 se vio obligado a embarrancar en Julio de 1944 durante la invasión de Barfleur. El Z33 también pasó a manos británicas, pero rápidamente lo cedieron a la URSS quien lo tuvo en servicio hasta principio de los años 60. El Z34 resultó muy dañado en abril de 1945 por un torpedo ruso, pero no se hundió. Lo llenaron de gas venenoso (sobrantes de guerra) y lo hundieron en el mar en 1946. El Z37 fue hundido en Bordeaux en 1944. El Z38 pasaría a servicio británico quiénes lo mantuvieron hasta 1949 vendiéndolo como chatarra. Y por último, el Z39 que tras un breve periodo en manos británicas pasaría al servicio de los EEUU. Estos se lo venderían a Francia en 1947 quienes lo remolcarían a Casablanca y lo utilizarían como fortaleza flotante. Más tarde, 1951, sería remolcado a Toulon donde sus piezas serían utilizadas para reparar otros destructores alemanes. El resto del barco se desmantelaría en 1964.
Se podría decir que es la versión 1936A eliminando los malos cañones de 150 mm y colocando los viejos y fiables 127 mm y aumentando el resto del armamento. A esta clase corresponden el Z35, Z36, Z43, Z44 y Z45. Los dos primeros se perdieron en una operación de minado del Golfo de Finlandia. Los dos últimos cayeron bajo las bombas de la RAF y el Z47 encalló en la bahía Geltinger al final de la guerra.
De forma estricta, estos son los últimos destructores alemanes que se basan en el primero modelo. La principal diferencia con los modelos precedentes es la instalación de un cañón de 128 mm de uso dual. Ninguno de ellos, había previsto cinco, del Z46 al Z50, llegó a construirse. De hecho, sólo dos estaban fabricándose desde 1943, pero avanzaban muy despacio y el final de la guerra les sorprendió en el dique. Serían desmantelados ambos.
Quizás no sea correcto denominar destructores a esta clase. Algunas fuentes inglesas los denominan como scout cruiser (traducido a veces como crucero explorador) que es una clase naval de la Primera Guerra Mundial. Están a medio camino entre el destructor y el crucero ligero. La cancelación de la clase 1938 (los que hubieran sido los Z40-Z42) hizo que los alemanes decidieran construir estos cruceros más grandes, más pesados (aunque peor blindados) y mejor armados que los destructores. Se inició la construcción de uno de ellos (el SP1 (Spähkreuzer - crucero explorador) en 1941, pero fue abandonado en 1943 y sus materiales reutilizados en otros proyectos.
Sólo un barco, el Z51 forma parte de esta clase y fue el último de los destructores "Z" que llegó al agua. En 1944 salió del dique, pero un bombardeo en marzo de 1945 lo hundiría antes de que terminaran de equiparlo. Como no se había hundido a mucha profundidad, lo desmantelarían entre 1946 y 1948.
La principal mejora de este modelo era el motor diesel para impulsarlo.
Fue el último modelo de la serie Z y se benefició de todo lo aprendido con anterioridad. Tenía un motor diesel que le permitiría desplazar 3700 toneladas a 37 nudos y su armamento incorporaba los mejorados 128 mm y bastantes armas con capacidad antiaérea. La falta de materiales hizo que la construcción de los seis buques (del Z52 al Z56) se detuviera en 1943. Fueron aprovechados para otros proyectos.
La flota alemana se nutrió de tres destructores capturados a naciones derrotadas por sus ejércitos:
El ZH1, de origen holandés era un destructor de la clase Isaac Sweers conocido previamente por Gerard Callenburgh. Desplazaba 2200 toneladas, tenía una eslora de 107 metros y su armamento principal era de 120 mm. Alcanzaba los 37 nudos y era manejado por 230 tripulantes. Resultó hundido por torpedos durante la operación Barfleur dentro de la campaña de Normandía.
El ZF2, de origen francés, estaba en construcción a la caída de Francia y los alemanes decidieron acabarlo y quedarse con él. Reformaron toda la superestructura y modificaron todo el armamento con los estándares alemanes. Sin embargo, la construcción fue frenada y boicoteada por los trabajadores franceses y en 1943 los alemanes decidieron que no merecía la pena y abandonaron la construcción.
El ZG3, de origen griego, es un destructor británico (clase G) que había sido cedido a los griegos en febrero de 1939. Cuando los alemanes invaden Grecia, su tripulación lo embarranca en Scaramanga, pero no resulta muy dañado y los alemanes pudieron reflotarlo y ponerlo en servicio de nuevo con el nombre de Hermes. Entró en servicio en 1942 y resultó bombardeado por la RAF en 1943 cerca de Túnez gracias a que el destructor se encontraba inmovilizado en un campo de minas. Embarrancaría una semana después y sería desmantelado entre 1944 y 1945.
Además de los anteriores, los alemanes también capturaron algunos destructores italianos (y yugoslavos capturados previamente por estos). Los alemanes los clasificaron como buques torpederos, pero eran destructores por prestaciones y funcionalidad. Estos fueron: el TA14 (Turbine), TA15 (Francesco Crispi), TA31 (Dardo), TA32 (Premuda, antes Dubrovnik), TA33 (Corsaro, antes Squadrista), TA43 (Sebenico, antes Beograd) y TA44 (Antonio Pigafettta).