Número: 142. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
La iluminación del terreno o del entorno puede afectar a las acciones que emprenden los personajes. En ocasiones nos hemos referido a ella en los diferentes reglamentos publicados por Sombra, pero no de una forma estructurada o metódica, lo que intentaremos realizar en este artículo.
A efectos de juego, la iluminación nunca es beneficiosa para el personaje, sino que sólo puede no perjudicarle. Se asume que las habilidades y capacidades descritas en los libros de juego están pensadas para iluminaciones normales y, por tanto, el personaje no sufrirá ninguna bonificación ni penalización debida a la iluminación.
No existe ningún tipo de iluminación que favorezca las acciones. Por otro lado, ten en cuenta que hablamos de los efectos de la luz, pero da igual cual sea el sistema de recepción visual (en juegos con diversas especies) y también da igual cual sea la intensidad real de la luz. Una criatura acostumbrada a vivir en la oscuridad, la luz natural puede resultarle excesiva y otra criatura que habite en el desierto puede quedarse en penumbras bajo la luz de una bombilla. Esto incluso podría ocurrir con diferentes frecuencias (colores) de la luz. Una especie incapaz de ver el amarillo, podría estar a ciegas en una carretera de montaña alumbrada con luces de emergencia.
Las penalizaciones por iluminación solo perjudicarán a las habilidades o capacidades que dependan de los ojos para realizarlas. Por ejemplo, una habilidad de Escuchar no se verá afectada, pero si el juego tiene la habilidad de Descubrir (incluyendo ver y escuchar en la misma), el DJ tendrá que tener en cuenta que si la vista es importante, la iluminación le afectará. Correr o trepar están afectados por la iluminación, pero para la dialéctica o para las habilidades de conocimiento, la iluminación no será un aspecto a tener en cuenta.
Hablaremos de iluminación excesiva cuando la intensidad de la misma supere lo normal. La luz hace daño a los ojos y el personaje necesitará cubrirlos, ya sea con gafas de sol o con una visera. La intensidad de la luz es tal que los objetos pierden definición porque nuestros receptores visuales son incapaces de absorber tanta información. Las TA estarán penalizadas con un grado de dificultad. Algunos planetas y algunos entornos artificiales (como laboratorios biológicos) pueden tener iluminación excesiva de forma normal.
Hablaremos de penumbra cuando la fuente de luz sea muy débil e impida distinguir colores y formas (sería semejante a una niebla espesa). En la penumbra nuestros ojos reciben muy poca luz y no son capaces de extrapolar bien toda la información. Una linterna o equipo similar puede hacer que algunas zonas no estén en penumbra, pero, por contraste, convertirán el resto de las zonas en oscuridad. Es la iluminación habitual en casas abandonadas en las que sólo entra la luz de la luna por la ventanas, en callejones no iluminados de las ciudades o en los bosques muy frondosos en días nublados.
Para terminar, hablaremos de oscuridad cuando no haya ninguna fuente de luz directa. Todo está oscuro y sólo se intuirán los objetos como formas oscuras dentro de una oscuridad mayor. La ausencia de luz no tiene que ser total (como si el personaje estuviera ciego), pero la luz será muy escasa. Las TA estarán penalizadas con dos grados de dificultad. Es la iluminación de una calle cuando se va la luz, o la de las habitaciones cuando sólo entra una rendija de luz debajo de la puerta, o la del planeta donde se estrelló Riddick en la primera película (Pitch Black) después de que empezara el eclipse.
En oscuridad total, solo los personajes entrenados podrán realizar acciones y se considerará, de todas formas, que están en una iluminación de oscuridad o de penumbra. Un personaje ciego, por ejemplo, está habituado a moverse en total oscuridad. El DJ podrá considerar que realiza sus acciones en penumbra o en oscuridad (o incluso en iluminación normal si conoce el entorno). Lo mismo podría aplicarse a un ninja entrenado en una misteriosa disciplina de monjes ciegos de Kioto. Sin embargo, en general, en una oscuridad total no se pueden realizar acciones en las que la vista sea necesaria.