Número: 102.     4ª época.     Año XXI     ISSN: 1989-6289

102 > Equipo > Armadas > La armada yugoslava (CdG). Por: Juan Carlos Herreros Lucas

 

La Armada Yugoslava

Tras el final de la Primera Guerra Mundial y el fraccionamiento del Imperio austro-húngaro, la idea inicial fue que toda la flota pasara a manos de Yugoslavia; sin embargo, los italianos pusieron muchos reparos a que toda la flota quedara en manos de su vecino y que una nueva potencia naval les disputara el Adriático. Por ello, la flota austro-húngara fue repartida entre las naciones recién creadas y Yugoslavia se quedó con los modelos más antiguos: doce torpederas, cuatro dragaminas (muy antiguos), cuatro barcos fluviales y un número impreciso de barcos auxiliares. Estas entregas se verían reforzadas, poco después, con material retirado de Alemania: seis dragaminas de la clase M (alemana) y un viejo crucero, el Niobe.

Los primeros años de la nueva nación fueron bastante difíciles, con grandes tensiones étnicas y nacionalistas, el gobierno yugoslavo no tenía muchas posibilidades de invertir en reforzar su Armada, lo que se complicó aún más cuando estalló la crisis económica de 1929. Durante estos primeros años, los astilleros yugoslavos no botaron ningún barco y no fue hasta 1930 que no salieron cinco pequeños dragaminas (que habían sido encargados por el gobierno austriaco). Sin embargo, se compraron barcos a otros países para reforzar la Armada: un destructor, cuatro submarinos y dos patrulleras costeras.

En 1934, el rey Alexander fue asesinado en Marsella y eso provocó un cambio de gobierno y un acercamiento de Yugoslavia a la esfera de influencia de Alemania e Italia (alejándola de sus antiguos aliados: Gran Bretaña, Francia o Checoslovaquia). Esto cambió la actitud del gobierno frente a sus astilleros y llegaron a entregar 8 torpederos y dos submarinos tipo II alemanes. Incluso se planteó la construcción de dos destructores de la clase Beograd, auqnue finalmente no se realizaron.

La Armada Real en el exilio

En 1941, el gobierno yugoslavo decidió que su alianza con los poderes del Eje podía llevarle al desastre (Alemania presionaba para que entraran en la guerra contra Grecia). Este cambio político aceleró la intervención alemana en el país, intervención a la que se unió Italia y que tuvo como consecuencia la destrucción de casi todas las fuerzas navales yugoslavas y las que no fueron destruidas fueron requisadas por los italianos. Cuatro barcos escaparon a este destino: el destructor Zagreb que resultó dañado en el puerto y el submarino Nebojsa y las patrulleras Durmitor y Kajmakcalan que consiguieron escapar y alcanzar un puerto Aliado. Estos tres barcos formaron las Armada Real Yugoslava en el exilio. El destino de las fuerzas fluviales fue peor. Casi todos los barcos resultaron hundidos por la aviación durante los combates.

Los Aliados reforzaron la La Armada en el exilio en 1943 añadiéndole una corbeta y devolviéndole los barcos requisados por los italianos tras la rendición de este país. En 1944, mediante el mismo sistema de Préstamo y Arriendo que Estados Unidos había usado con otros países, los yugoslavos adquirieron varias patrulleras más. En noviembre de 1945, tras la proclamación de la República Federal Yugoslava, la bandera de la Armada real fue arriada y todos los barcos se unieron a la Armada de la nueva República.

La Armada de Tito

Las fuerzas guerrilleras yugoslavas llegaron a formar un auténtico ejército y, a la postre, fueron capaces de liberar su país antes de la llegada de los ejércitos Aliados. Estas fuerzas llegaron a contar con su propias fuerzas navales que recibieron el sobrenombre de "Armada de Tito". Los primeros barcos fueron dos buques pesqueros reconvertidos: Partizan y Pionir y que fueron utilizados en tareas de transporte. La mayoría de los barcos de esta Armada fueron barcos reconvertidos instalándoles cañones capturados al enemigo o abastecidos por los Aliados. Además, las fuerzas de Tito capturaron algunos barcos croatas, y alemanes de pequeño tonelaje y el barco italiano Stella Blanca (renombrado como Crvena Zvezda, Estrella Roja) y que fue el buque de mayor tonelaje de la Armada de Tito. Se calcula que unos 90 barcos de pequeño tamaño llegaron a formar parte de las fuerzas partisanas.

La Armada croata

Como hemos comentado, Yugoslavia tenía fuertes divergencias étnicas en su seno. Algunas fuerzas croatas, por ejemplo, se negaron a combatir contra los alemanes (aduciendo que Serbia era realmente el enemigo) y permanecieron en sus posiciones. Tras la invasión, Alemania (y especialmente Italia) apoyaron la formación de un estado independiente en Croacia. Aunque Croacia era, formalmente, un estado independiente, sus decisiones estaban supeditadas a sus aliados y, especialmente, los italianos se opusieron a la formación de una Armada Croata. Sin embargo, Alemania no estuvo de acuerdo y permitió que los croatas formaran el llamado Destacamento del Mar Negro: tripulaciones croatas que operaban en dicho mar (muy lejos del Adriatico para tranquilidad de los italianos), pero formarían, según los planes alemanes, la columna vertebral de la Armada croata. Tras la rendición italiana, los alemanes dieron luz verde a la Armada croata y le cedieron varios barcos yugoslavos y les cedieron algunos alemanes.

La historia de esta Armada croata no fue muy larga. El empeoramiento de la situación bélica para Alemania hizo que muchos croatas empezaran a simpatizar con los partisanos y algunos barcos se pasaron de bando, otros no llegaron a hacerlo porque los alemanes detuvieron y cambiaron a las tripulaciones antes de tiempo (como en el caso del torpedero T7. La mayoría de los barcos croatas resultaron hundidos por sus tripulaciones antes de su captura.

En resumen

Torpederos:

Clase T1 (antiguo grupo T de la clase 74 austro-húngara)

Clase T5 (antiguo grupo F de la clase 74 austrohúngara, todos fueron capturados por los italianos en 1941)

Clase T9 (antigua clase Kaiman austrohúngara)

Dragaminas:

Clase Galeb (clase M alemana, todos ellos fueron capturados por los italianos en 1941):

Otras clases:

Destructores

Drubovnik

Drubovnik: uno de los mayores destructores de su tiempo construido por los británicos en 1931. Los italianos se lo quedaron en 1941 y lo llamaron Premuda e incrementaron sus cañones y, sobre todo, su defensa antiaérea. Fue capturado por los alemanes en Génova en septiembre de 1943 llamándolo TA7232 y volviéndolo a rearmar con cañones más potentes y equipándolo para la guerra nocturna. Sería hundido por su tripulación en Génova en abril de 1945.

Clase Beograd: la clase Simoun francesa que fueron adquiridos por Yugoslavia. Uno se construyó en Francia y los otros dos en Yugoslavia bajo licencia.

Beograd

Submarinos

Clase Ostetnik: Dos sumbarinos, el Osvetnik y el Smeli formaban parte de esta clase de origen francés. Ambos fueron capturados por los italianos en 1941 y destruidos por en septiembre de 1943, uno por los italianos y el otro por los alemanes.

Clase Hrabri: Dos submarinos de la clase L británica. El Hrabri fue capturado por los italianos en abril de 1941, pero dadas sus malas condiciones no llegaron a ponerlo en serevicio y lo desmantelaron. El Nebojsa huyó a Alejandría en 1941 y participó en las flotillas de submarinos británicas como submarino de la Armada Yugoslava en el exilio hasta el final de la guerra. Tras esta permanecería en servicio hasta 1954.

Otros barcos

La corbeta Nada fue una de la clase "Flowers" cedida por los británicos a los yugoslavos en 1944. Tras la guerra recibiría el nombre de Partizanka y en 1949 sería devuelta a Gran Bretaña que se la cedió a Egipto donde recibió el nombre de Sollum.

Malinska

La clase Malinska eran una disparidad de barcos para el tendido de minas que entraron en servicio en la Armada yugoslava procedentes del Imperio Austro-Húngaro y de Italia. Todos fueron capturados por los italianos en 1941.