Número: 94. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
[...]Todos los que han intentado abatir al gran Eilic saben que una lanza puntiaguda no sirve de nada. Podrías alcanzarle pero nunca conseguirías cobrarte la presa. Cuando tu lanza golpea a la bestia puedes atravesarla de lado a lado, pero escapará. Aunque puedas seguir su rastro de sangre, cuando des con el cuerpo solo encontrarás huesos ya que las alimañas se habrán comido al animal. Si la lanza se clava y se queda en el cuerpo tapará la herida y la bestia sangrará poco. Para poder abatir al gran Eilic tendrás que darle un golpe certero. Pero lo más importante es que tu lanza se le clave en las entrañas y le mate mientras huye.[...]
Un cazador aisdwan a su hijo.
Una lanza de madera, de hueso o de cualquier otro material es un arma eficaz y rápida de fabricar, pero tiene muchas limitaciones. Si se intenta cazar con ella a una criatura pequeña es posible que con el primer golpe la criatura muera, pero si la criatura es más grande es poco probable que ese primer golpe la abata, y eso implica que la criatura tendrá ocasión de escapar. El ejemplo más claro es intentar matar a un pez con una lanza de punta cónica. Si se consigue atravesarle y que la lanza se clave en el fondo el pez no podrá escapar, en otro caso el pez podrá deshacerse de la lanza con los movimientos. Es posible que el daño haga que el pez muera de cualquier forma, pero el cazador tendrá dificultades en recuperar la captura.
Para suplir las carencias de las lanzas cónicas algunos cazadores suelen reforzar sus lanzas con una pieza de piedra o de hueso afilado unido de alguna forma en la punta de la misma. Una lanza con punta de piedra o hueso atada es un arma que puede hacer mucho más daño, ya que gana capacidad de penetración, causa daños internos y es difícil de desprenderse de ella una vez clavada. La unión de la punta con la lanza suele hacerse con cuerdas por lo que hay que reforzarla continuamente y aún así puede romperse cuando menos se lo espera uno.
Desde hace generaciones los aisdwan han desarrollado un sistema para unir pequeñas piezas de piedra o hueso a sus lanzas. Utilizar pequeñas piezas en vez de una pieza grande hace que la lanza sea más ligera, más fácil de equilibrar y mejore la penetración. También hace que sea aún más difícil desprenderse de ella, por lo que puede utilizarse para cazar animales grandes.
El pegamento que utilizan los aisdwan es una mezcla de pulpa de madera mascada y agua. El cazador aisdwan aplica una pequeña porción de la pasta de madera y sobre ella coloca la esquirla de piedra o hueso que va a utilizar, después coloca más pasta en uno de los lados de la esquirla. Después deja la lanza toda la noche fuera de su choza. Al día siguiente aplica más pasta en el lado contrario y vuelve a dejarla congelarse durante otra noche. Pueden aplicarse capas adicionales de pasta para reforzar la unión. Las lanza será más resistente cuantas más capas tenga, pero hay que evitar que rebosen y no dejen expuesto el filo de la esquirla, por eso las capas adicionales deben ser muy finas. Este pegamento no puede utilizarse en cualquier lugar, si la temperatura asciende del punto de congelación del agua el pegamento se ablanda y las esquirlas se desprenden.
El pegamento de hielo puede utilizarse sobre una lanza, jabalina o incluso sobre flechas. Confiere un bonificador de +1 al daño. Solo puede utilizarse con esquirlas de piedra o de hueso. De forma excepcional podría utilizarse con pequeñas piezas de metal, pero es poco probable que aguante el peso de las mismas.
Artículo basado en la entrada "ice glue" de la web "primitive ways"