Número: 119. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
Como saben los cuervos de Taga...
Las primeras informaciones revelan que los gardan han iniciado su marcha, un viaje que les llevará a nuevos asentamientos y, al parecer, se dirigen hacia la puesta del sol. Targaht, su líder, no ha revelado el destino del pueblo león ni cuantos días durará la marcha, pero su dirección ha inquietado a otras razas. Su caminan lo suficiente pueden llegar hasta Aguaclara o introducirse en la península de Entrovia. Si salen de las planicies, cualquier lugar podrá ser su destino. Nadie quiere una guerra con los gardan.
Las gentes de Masudrak se han vuelto a enfrentar con sus vecinos del otro lado del paso de Anûr. Por segunda vez, han chocado contra las defensas del paso y han repelido a sus agresores. Se trataba, al parecer, de una partida pequeña en lo que algunos interpretan como un tanteo previo para la batalla definitiva. Las forjas de Masudrak llevan trabajando desde la Batalla del Paso Solitario y hoy día no hay ningún dwaldur del valle que no tenga un arma lista para combatir. Sin embargo, Masudrak prefiere la prudencia. Sabe que si abandona sus posiciones defensivas perderá parte de su ventaja militar. Sin embargo, a muchos de sus vecinos le hierve la sangre de la venganza por los muertos en los últimos enfrentamientos. No podrá contenerlos mucho tiempo.
El grakin de Valar, cerca de la Tierra de los Akari ha quedado cubierto por las aguas. El río, junto al que estaba construido, ha subido repentinamente más de 3 varas su cauce empantanando todas las casas bajas del grakin. Afortunadamente la crecida no fue muy rápida y sólo han muerto tres ancianos que no pudieron ponerse a salvo a tiempo. La sala central, en lo alto del grakin, aún permanece sobre las aguas, pero diversos reptiles están dando cuenta de los alimentos que habían dispuesto para su secado. Hasta el momento se desconoce el motivo de la crecida, pero los chamanes han recordado las palabras de Luz de Druma: "el agua reclamará vuestros hogares" y aseguran que este incidente ya estaba profetizado.
Por sorpresa, sin haber sido avistados por los vigías del grakin, ni por las patrullas de exploración, ni por los numerosos comerciantes de la zona, cinco dwaldir se han presentado en el grakin de Aguaclara y han pedido audiencia con Ursus (algunas fuentes dicen que la han exigido). Se sabe que traían un importante y valioso regalo para el líder del grakin, pero se desconoce qué era y con qué intención ha sido entregado. La reunión ha durado toda la noche y el chamán, así como otros consejeros de Ursus, han estado presentes en ella. Al amanecer, los dwandir han desaparecido de la misma forma sigilosa en la que aparecieron. Ursus ha pedido un tiempo para reflexionar antes de contar nada a los habitantes de Aguaclara.
Todas las noticias comentadas por el Sabio del Desierto han sido grabadas en la estela y son para el juego Pangea. Los Guardianes de la Roca recorren los caminos y los grakines de esta tierra primigenia y le notifican los acontecimientos al viejo tallador. Todas ellas son fruto de las partidas realizadas por los jugadores de Pangea o por el equipo creativo de la propia editorial. El viejo chamán las cuenta en las noches en torno al hogar con la intención de dar puntos de apoyo a la continuación o al desarrollo de las partidas. Si quieres comunicarnos alguna noticia sucedida en tu mesa de juego, envíanos un mail.