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Las guías de Metrojina
Al final de la Edad de los Héroes o quizás un poco después, surgió en Cargrum una serie de guías de viaje. Las editaba una editorial cuyo nombre se ha perdido en el tiempo, pero que iban firmadas por Metro Jina, un infatigable viajero que había viajada más allá de las tierras conocidas (por aquel entonces). Con la paciencia de un enciclopedista, Jina había recopilado lugares, personajes, localizaciones y demás referencias de los lugares que pasaba. Un trabajo que le llevó una vida y cuya culminación fue la publicación en una serie de volúmenes de bolsa (se llama así a los libros pequeños que pueden llevarse en una mochila o bolsa de viaje).
No se sabe el número exacto de volúmenes que se publicaron, pero hay quién dice que fueron 23, pero no hay copias de todos ellos en ningún sitio. Se cree que fueron 23 porque la guía de lo que ahora se conoce como Gran Federación del Este tiene ese número y no se conoce ninguno mayor, pero, entre otros, falta el 9, el 12, el 20. El 1, por ejemplo, está dedicado a Cargrum.
Los estudiosos de las guías creen que no fueron escritas por una misma persona (por los diferentes estilos) y especulan que el nombre, en realidad, hace referencia a un gremio o sociedad geográfica. Otros afirman que Metro Jina es un anagrama de Jion Mater y que el famoso explorador es el verdadero autor de estas guías. De hecho, esta es la creencia más popular, aunque no hay nada que la sustente. En cualquier caso, solo los muy estudiosos escriben Metro Jina y para el resto de los viajeros son las guías de Metrojina o, simplemente, las metrojinas.
Las guías originales aún se pueden encontrar en lugares poco explorados, formando parte de bibliotecas antiguas, pero es un objeto de gran valor y casi todos acaban vendidos a acaudalados dueños con inaccesibles bibliotecas. Aun así, existen copias de las guías con mayor o menor fidelidad y editadas por un sinfín de comerciantes de libros.
Las guías originales tienen referencias de lugares de hace decenas de años y su consulta puede ser muy interesante para buscar referencias de ciudades olvidadas, nombres antiguos de los sitios y demás. Estas copias son caras. Lo más normal es encontrar metrojinas actualizadas que han añadido información más actual, destruyendo o ignorando parte de la información en el proceso. Aún pueden ser una referencia para buscar cosas antiguas, pero son menos fiables. Los aventureros profesionales trataran de hacerse con una copia de las originales, pero si no es posible tendrán que conformarse con alguna de las actualizadas.
Naturalmente, existen copias falsas llenas de datos inventados o inexactos, incluso algunas más malignas que guiarán a los viajeros a trampas o callejones sin salida donde serán desprovistos de sus bienes terrenales. Fiarse de una guía inexacta o maligna es el primer paso hacia el desastre.
Se dice que en Cargrum y en Ôs hay una copia de cada metrojina antigua que se ha descubierto hasta ahora. Ambas bibliotecas rivalizan por ser la que obtenga algún ejemplar no descubierto hasta la fecha, incluso pagan expediciones con el objetivo de encontrar los libros perdidos de las metrojinas.
Usando las metrojinas
Cualquier personaje que consulte las metrojinas para obtener información tendrá un grado de dificultad de bonificación. Ten en cuenta que para obtener este grado de bonificación, la información debe estar en la guía. Si se está buscando la entrada a una ciudad abandonada hace 100 años en una guía actualizada, inventada o maligna, no obtendrás ninguna bonificación. Lo mismo ocurrirá si se busca información actual en una antigua; la ubicación y nombres de las tabernas actuales no coinciden con las de la época de la guía, aunque algunas, por la mugre que acumulan, quizás lleven desde entonces.