Carlos León

El alma de los pizzeros

Historia

Carlos León nació en el seno de una familia obrera en el barrio Libertad. Su padre era soldador y su madre limpiaba casas algún que otro día para redondear los ingresos de la familia. Bastante espabilado, desde niño sus padres hicieron lo posible por conseguir darle unos buenos estudios. Como en el fondo era un pedazo de pan, la problemática de su barrio le impulsó a estudiar Trabajo Social, al tiempo que trabajaba como camarero para pagarse los estudios. Consiguió muy buenas notas y un contrato de Orientador en un Centro Juvenil cercano. Su trabajo, aunque gratificante al principio, pronto comenzó a frustrarle. Sus buenas palabras no podían competir con todo un mundo lleno de violencia, drogas, crimen y dinero fácil. Un día, con unas cuantas cervezas de más, desahogó sus frustraciones con su hermano Jesús en el bar de este. Esa noche acabó siendo especialmente fructífera, ya que dio origen a la curiosa banda de los pizzeros (ver artículo)[enlace].

Desde entonces Carlos se dedica en cuerpo y alma a su proyecto empresarial. No ceja en su empeño de conseguir algún tipo de ayuda de los agentes sociales de Cunia, pero la originalidad de su proyecto no ha sido completamente asimilada por los funcionarios de Cunia, además de que, en el fondo, a la policía no le hacen mucha gracia los métodos de los pizzeros.

Descripción

Carlos es un tipo que al verlo se nota que irradia una magnética personalidad. De aspecto bien cuidado aunque quizá juvenil en exceso para sus 32 años, suele vestir vaqueros y sudaderas con estampados de películas y comics. Tiene una talla media (1,75) y lleva su pelo moreno corto con un peinado algo clásico.

Personalidad

Carlos tiene la asombrosa facultad de saber escuchar. No importa lo que le estés contando, siempre muestra interés, participando en la conversación solicitando aclaraciones y soltando algún que otro consejo en forma de anécdota personal. Su frase preferida es "una vez conocía a un tipo en la misma situación que tú" y, habida cuenta de lo que lleva vivido, normalmente suele ser cierto. Realmente se preocupa por los chavales, algunas veces incluso en detrimento de la ley y el orden establecido.

Como jugarlo

Carlos normalmente evitará el conflicto. No por miedo sino porque sabe que su autoridad se vería manchada si sucumbiese a la violencia. Normalmente se erigirá como mediador en los conflictos en los que vea, mostrándose amable pero firme. No dudará en soltar algún grito o amenaza si la situación comienza a irse de las manos. Es muy protector con sus chavales y si los ve en peligro se meterá en la bulla a repartir como el que más.

Ficha

Pasos

Características y atributos

Habilidades

(valores sin atributos)

Virtudes y desventajas

Equipo

Una motocicleta con la que de vez en cuando hace algún reparto y una pequeña navaja de mariposa por si necesita ponerse especialmente intimidante o las cosas acaban por salirse de madre.