Número: 107. 4ª época. Año XXI ISSN: 1989-6289
Los zisum ("los que alejan al que ataca") son unas extrañas criaturas creadas mediante el poder de la brujería y la alquimia. Los zisum son símbolos de prestigio, pequeños guardianes o, para muchos awilu, fieles amigos. Tienen cabeza de chacal, cuerpo de león y las patas delanteras de un águila. Son extremadamente fieles a sus amos y no resulta extraño que, si éste muere, el zisi deje de comer y muera de tristeza poco tiempo después. Es infrecuente que los zisum se reproduzcan por lo que los cachorros siempre alcanzan un alto precio, si es que están a la venta.
Son animales juguetones y cariñosos a los que les encantan los niños. De hecho, suelen ser un regalo principesco para los recién nacidos de alta cuna. Del chacal poseen la astucia y el sigilo, puesto que son animales muy inteligentes. Del león tienen la valentía, que les impulsa a enfrentarse a cualquier enemigo que amenace a su amo. Del águila heredaron la ferocidad y la bella estampa. Todo ellos hace que sean inapreciables como mascotas para los niños awilu, puesto que jamás permiten que sufran daño alguno.
Según la leyenda, la primera pareja de zisum fue creada por un sabio guerrero-mago que luchó junto a Sargón en la insurrección contra los dioses. Este noble guerrero habría caído en batalla, herido de muerte por un afilado dardo enemigo que le entró por un ojo (por un oído según otras versiones de la historia). Según parece, los infames sirvientes de los dioses habrían intentado llevarse el cuerpo del caído para profanarlo descuartizándolo. Sin embargo, los zisum lo impidieron y robaron el cuerpo para que pudiera ser honrado como se merecía. Como recompensa por este acto, el mismísimo Sargón dictó una prohibición perpetua de dañar a los zisum, un decreto que perdura incluso hoy: "aquél que golpee a un zisi será azotado con una vara de avellano no más gruesa que su dedo pulgar. Aquél que lo hiera perderá la mano o el pie que causó la herida. Aquél que lo mate será a su vez muerto. Ésta es la palabra de Sargón".
El saber popular afirma que los zisum solo aceptan órdenes de aquellos que merecen su respeto y que, de una u otra forma, atesoran en su interior el potencial para la grandeza. Así pues, no resulta extraño que los awilu de alto rango cuenten con uno o más de estos animales entre sus más preciadas posesiones, ya que son un símbolo que demuestra tanto su riqueza como la nobleza de su alma.
Y, sin embargo, de un tiempo a esta parte se vienen escuchando historias acerca de que, a veces, los zisum abandonan a sus amos awilu para seguir a un mushkenu u otro miembro de las razas inferiores. Por supuesto, no creo que haga falta decirlo pero en Akkad la posesión de un zisi por un no-awilu se castiga con la muerte.
Idea de aventura
El zisi de un poderoso noble awilu detecta el potencial para la heroicidad que reside en las almas de los PJ y decide abandonar a su decadente amo para acompañarles en sus aventuras. Si intentan ahuyentarle por las buenas les pondrá ojitos a lo gato con botas de Shrek. Tampoco pueden despistarle durante mucho tiempo ya que, no importa lo que los PJ hagan, el animal siempre vuelve a encontrarles... ¿Qué van a hacer al respecto? ¿Serán capaces de hacerle daño al animalillo (con las consecuencias legales que tal acto podría acarrearles)? ¿Qué pasa si, estando en un situación comprometida, el zisi les salva la vida? ¿Serán o no capaces de desembarazarse de él? ¿Qué pasará cuando el anterior amo del zisi aparezca con un cabreo de mil pares?