DESDE EL SÓTANO
Nº: 109 . 3ª época. Año III
Caravanas IV (dwaldur) Por: Rubén Ramos
 

Caravanas IV

Dwaldur

Los dwaldur necesitan comerciar si quieren sobrevivir. Las regiones que habitan, por lo general son yermas en cuanto a recursos. Sí es cierto que tienen un acceso a los metales privilegiado si lo comparamos con el resto de habitantes de Pangea, pero lo cierto es que la habitual falta de alimento les empuja a comerciar con frecuencia casi continuada.

Por lo general, las caravanas dwaldur son las menos viajeras de todas las razas, puesto que su modo de operar se centra en establecer una serie de acuerdos con las comunidades cercanas a su territorio y a partir de ese momento explotar ese acuerdo invierno tras invierno. Salvo que se produzca algún hecho excepcional (un trato traicionado, por ejemplo) los dwaldur no buscarán abrir más mercado si no tienen necesidad de ello. Por lo general, el crecimiento de la comunidad es lo que fuerza a las caravanas dwaldur a viajar más lejos para obtener recursos.

Los comerciantes dwaldur son, bajo el estándar en el que se observan a los comerciantes, rácanos pero justos. No sueltan fácilmente sus posesiones y hay que negociar duramente para establecer un acuerdo comercial que no sea abrumadoramente ventajoso para ellos. Los dwaldur dan mucha validez a la palabra de una persona. Una vez que alguien jura y estrecha la mano, debería cumplir lo dicho. En ocasiones es una tarea tediosa o gravosa, pero quien lo hace descubrirá que los acuerdos posteriores se llevan de manera más fácil e incluso más útiles o ventajosamente económicos que los anteriores. La confianza lo es todo y eso se recompensa por los dwaldur.

Los dwaldur, a diferencia del resto de razas piensa en empresas a largo plazo. El beneficio puede ser bajo a corto plazo pero a la larga siempre redundan en su beneficio personal y en el de la comunidad. Un comerciante ambicioso al estilo h'sar, no está bien visto. Los materiales que más aprecian son los productos de origen vegetal (como cuerda o madera) o animal (pieles exóticas) alimentos y esclavos para las minas.

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