Toca mojarse

La semilla que os proponemos este mes para Rol Negro es perfecta para la vuelta de vacaciones. Después de todo, ¿cómo combaten los jefes el exceso de estrés de la vuelta al trabajo? Trabajando menos. Eso es lo que habrá decidido uno de los jefes o cargos importantes de la organización criminal para la que trabajan los personajes. Combinando magnanimidad y miedo a que le peguen un tiro, el mandamás habrá elegido al grupo de personajes como escolta durante los tres días que dure su escapada.

Adicionalmente, convendría que el grupo de juego tenga alguna idea de negocio, cambio importante en la organización, plan de atraco, nuevo producto que llevar al mercado, algo, que les interese convencer al jefe de poner en marcha. Puede ser por una idea en beneficio de la organización, pero lo ideal es que además les beneficiara a ellos directamente.

Esta escapadita a solas con el jefe o jefa es la oportunidad perfecta para venderle la idea en un ambiente relajado y sin molestos moscones alrededor. O eso creen los personajes. En realidad, el viaje va a ser el momento para que oportunistas intenten el robo, el espionaje o incluso el asesinato contra el mandamás.

[F]Mural de varios artistas de la California School of Fine Arts (1933). "City Life". Imagen comisionada por el Public Works of Art Project. Licencia Dominio Público.

El viaje

La persona a la que protegen los personajes tiene intención de pasar dos noches y tres días (de viernes a domingo) en un balneario cerca de Cunia. El lugar se llama Las Canteras y se encuentra al oeste de Cunia, en una zona de antigua explotación de piedra para construcción. Los tres edificios que componen el balneario están construidos en la misma piedra blanca de la zona.

Es el lugar ideal para un retiro discreto no solo por estar alejado de la urbe. Las muchas estancias dedicadas al disfrute acuático exigen de la ausencia de móviles, así como dificultan las escuchas y los micrófonos ocultos. También es ideal para esconderse por iniciativa de la propia empresa, que procura la mayor de las discreciones a sus visitantes, mediante un estricto protocolo y un personal de seguridad veterano.

Así, se ha convertido en el lugar ideal para políticos que quieren tener una comida discreta sin que le molesten, ni aunque se esté inundando el Ayuntamiento; empresarios de la distribución que buscan reunirse a pactar los precios del aceite de oliva; gente "de bien" que no quiere que la prensa le pregunte por la edad de su acompañante o por qué su abuelo Klaus se cambió el apellido al llegar a Argentina en el 47…

¿Creéis que será todo tan sencillo? No, porque con tanta humedad, el balneario atrae a los bichos.

Moscas

Ni qué decir tiene que un lugar así es el blanco perfecto del espionaje de todos los tipos. En concreto, los personajes deberán bregar con la presencia en el balneario de una pareja de agentes de la policía de Cunia, de paisano. Ya es mala suerte que sean de los pocos incorruptibles de la ciudad y quizás por eso les han mandado aquí a ver si meten la pata. Entre ellos hay además tensión sexual no resuelta, algo que la mesa podría aprovechar para una aventura aún más divertida. En cualquier caso, sus intentos de escuchar tras de puertas y paredes, de hacerse los distraídos para sentarse cerca en la sauna o de instalar micros en las habitaciones seguro que añaden entretenimiento a la escapadita.

Mosquitos

Si el grupo de personajes tiene una buena idea que les beneficia y que quieren venderle al jefe, por supuesto que habrá compañeros de la organización criminal que crean que esa idea estaría mejor guardada en un cajón, o que llegue al jefe pero de su propia boca. La cuestión es que este compañero o compañera envidioso habrá reservado casualmente ("hombre, jefe, usted por aquí") en el mismo balneario y para las mismas fechas. Procederá a dar la brasa e intentar comerle la oreja al capitoste con la mayor de las intensidades. Compaginará esta actividad con la de intentar mantener ocupados a los personajes en otras cosas o a hacerles quedar mal delante del objeto de sus deseos comerciales.

Escorpiones

Ni qué decir tiene que el plato fuerte de esta aventura estaba por llegar. Hasta ahora hemos tenido momentos para las molestias y hasta la risa pero un jefe criminal debe generar mucho más odio. Un topo en la organización habrá filtrado el viaje y una banda enemiga interesada en expandirse ha decidido enviar a un asesino a sueldo. Este deberá ser lo bastante competente como para suponer una amenaza real y un riesgo cierto de lograr su objetivo.

El resultado de este intento de asesinato marcará sin duda la decisión del jefe respecto de la propuesta de los personajes. Si tienen éxito en su defensa, claro. Si fracasan… su vida puede cambiar mucho más.