Tifus
El tifus es una enfermedad infecciosa que debería resonar con bastante miedo en los oídos de los personajes de Comandos de Guerra por la cantidad tan grande de muertes que venía produciendo allí donde hubiera guerras, hambruna, falta de higiene o hacinamiento. Más que una enfermedad sería un conjunto de ellas, producidas por varias especies de bacteria del género Rickettsia.
Estas bacterias son transmitidas por las picaduras de la pulga de la rata, aunque también por los piojos, ácaros y garrapatas. Las bacterias llegan al torrente sanguíneo al rascarse el portador la picadura.
Los síntomas de esta enfermedad varían dependiendo de la bacteria, pero en general incluye erupciones, dolores articulares, de cabeza y en el tronco, diarrea, tos, náuseas, vómitos y fiebre extremadamente alta.
Una vez infectado y sin tratamiento, las probabilidades que tiene un personaje de fallecer están entre el 10% y el 60%, dependiendo en especial de su estado de salud y nutrición, enfermedades cardiovasculares o pulmonares, y de la edad, teniendo mayor tasa de supervivencia los niños menores de 10 años y siendo más vulnerables los ancianos.
El miedo al tifus fue utilizado como propaganda, acusando a ciertos colectivos de propagarlo, como fue el caso de los judíos. Esta fue una más de las razones para apartarlos en guetos lo que, paradógicamente, ayudó a la propagación de la enfermedad, en lugar de contenerla.

[F]Oficina Estatal de Propaganda (1941-1945). "Propagandni plakat NDH kojim se upozorava na tifus u pripadnika NOVJ". Dominio Público. Cartel del Estado Independiente de Croacia acusando a las fuerzas de partisanos comunistas yugoslavos de portadores del tifus.
Si bien para el comienzo de la guerra ya se estaban desarrollando vacunas contra el tifus, estas no se administraban de manera general y en general los personajes no tendrán acceso a ellas, en especial si están en el frente del oeste de Europa o del Pacífico. Las principales epidemias de tifus de esa época estaban focalizadas en el este de Europa, en las prisiones militares, los campos de concentración, en los guetos, y en los grupos de refugiados o desplazados.
En ausencia de vacuna, la manera que tienen los personajes de reducir las probabilidades de infección por el tifus es seguir una serie de precauciones: mantenerse alejados de animales portadores como aves, ratas o ardillas, mantener la higiene, en especial el lavado del cuerpo, desinfectar con cuidado las picaduras y nunca rascarse estas. El uso del insecticida DDT (dicloro difenil tricloroetano) para el control de plagas mostró una gran eficacia como forma de evitar la propagación de la infección. Este fue utilizado durante la guerra pero sobre todo después de ella para el control de epidemias. Dependiendo del ejército al que pertenezcan, los personajes podrían tener acceso a este producto. Puedes ver una herramienta para su administración en un artículo de este mismo número de la revista (24061 ).
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