Habitación 333

[C]Semilla de aventura para Rol Negro

El hombre que reservó la habitación 333 en el hotel de pocas estrellas lo han descrito como una persona normal, anodina tal vez. Ropa de tiendas no exclusivas, apenas con una pequeña maleta a cuestas. Unas gafas de sol con un diseño ya un poco antiguo le ocultaban la mirada. Ningún gesto fuera de contexto. Nada que luego pudieses reseñar si te pidieran que lo describieses.

Alguien que lo vio de lejos acceder a su habitación recuerda que con él entró una mujer, que nadie había visto en la recepción. Una descripción de esta que casaba perfectamente con la del hombre. Una ¿pareja? más como la mayoría que transitaban por este alojamiento. Si pasaran las semanas costaría recordar algún detalle que los identificara. A lo sumo se podría decir que los dos eran caucásicos, el de pelo negro y de piel morena, ella rubia, con un semblante un poco más pálido.

El cartel de "no molesten" colocado en la puerta, durante la estancia pagada, evidentemente disuadía al servicio de limpieza de entrar. Con el paso de los días lo encontraban raro pero no era su problema, el cliente es el cliente.

Una vez pasado el tiempo que se había reservado, y en vista de que no hacía acto de presencia para devolver las llaves, y en vista de que no había manera de contactar con el hombre la decisión fue la de acceder a la habitación.

Y allí estaba el hombre, atado a una silla, con todo el cuerpo en carne viva y la cara desencajada. El interior parecía que había sufrido un pequeño huracán, todo estaba revuelto o roto. De la mujer no se tenía constancia.

Semejante desaguisado no había alertado a ningún otro inquilino del hotel. Parecía como si todo hubiese ocurrido dentro de una burbuja insonorizada. Y en el examen posterior al cuerpo se pudo constatar que este había sufrido un nivel de estrés extremo.

Así que… ¿Seréis capaces de esclarecer que pasó en esta habitación? ¿Quién era el hombre? ¿Y la mujer…? ¿Dónde está? ¿…?