Largo III, 1548

El tambor resiste

En un acto público celebrada en una abarrotada plaza de la gobernación y ante las autoridades del Reino elegido, se arrojó el tambor a un enorme hoguera preparada para tal fin. En un inicio, las potentes llamas cubrieron con rapidez el objeto ante los clamores de parte del público y las protestas testimoniales de unos pocos. La hoguera fue perdiendo intensidad bajo la atenta mirada de los responsables de incendios que vigilaban que las pavesas y virutas no prendieran en otros lugares. Cuando las llamas se consumían, se empezó a ver la silueta del tambor (fácil de reconocer por sus adornos) y eso generó una serie de murmullos, pero todos creían que, aunque conservara la forma, el tambor debía estar ardiendo por dentro. Sus esperanzas se desvanecieron cuando, horas después, las llamas se apagaron y el tambor permanecía. Cierto que una pátina de cenizas y hollín lo cubría, pero estaba claro que había resistido las llamas. Algunos hablaron de magia, pero las sabias gentes de la corte aclararon que el tambor estaba fabricado de maderas antiguas, duras y que sería necesario quemarlo a más temperatura. Sin embargo, el número de personas que creen que es un objeto mágico se ha incrementado después del fallido espectáculo.

Trama El Retorno del Emperador

Detenido un bibliotecario por alterar el orden público

La escolta de los funcionarios por parte de la guardia había reducido los incidentes entre estos y los bibliotecarios, pero la rivalidad sigue por todo lo alto y un bibliotecario fue detenido ayer tras proferir insultos y amenazas a funcionarios escoltados. No es la primera vez que ocurren estos insultos, pero la intensidad y gravedad de los mismos hizo a la guardia retirar al voceras de la calle. Ha sido encerrado en los calabozos de la guardia y se cree que los jueces podrían condenarlo a varias semanas en la prisión o, incluso, llegar a desterrarlo. Los compañeros del bibliotecario se manifiestan frente al cuartel de la guardia exigiendo su liberación.

Trama El Círculo

Llega la primera flota de Baltasar Grande

Tres navíos de gran tonelaje han entrado en el puerto en la dársena adquirida por Baltasar grande. Los tres barcos llegaban repletos de mercancías con la que planea abrir un puesto permanente en el mercado de la ciudad. Los testigos de la estiba de la carga aseguran que se trata de mercancía de gran calidad: vinos de Falîn y Xalîn, telas de Airak e Io, tallas en hueso del norte o cerámica del Reino Elegido. Han llamado mucho la atención varias cajas negras cuyo contenido permaneció oculto. Los mercaderes de la ciudad han protestado porque no se le apliquen aranceles a la descarga, pero la guardia no ha podido hacerlo porque Baltasar es legalmente ciudadano de Ôs y porque utiliza una dársena privada. Parece que las cosas van a cambiar en el mercado de la ciudad.

Trama El Legado de Utay Shim

Los loran deciden ir a la guerra

Tras los diversos incidentes con los pueblos loran, de naturaleza nómada y pacífica, con los soldados de Corus, se reunieron en asamblea diferentes líderes de tribus. No estaban todos, pero sí la mayoría de los que viven cerca de la frontera, que son algunas de las tribus más numerosas. Tras un debate largo (tres días), los loran decidieron ir a la guerra. Es la primera vez desde el emperador del norte que todas las tribus loran deciden ir a la guerra. Cuando la noticia ha llegado a Corus, las respuestas han sido variadas, desde los que desean un parlamento para que la cosa no vaya a mayores a quienes solicitan que se acabe de una vez con la amenaza de los vecinos del norte del reino. Parece ser que Corus se prepara para la guerra.

Golpe en Corus

Todas las noticias comentadas en los Papiros de Materjolm forman parte de la Ambientación Dinámica de Eriloe y se elaboran con las aportaciones del equipo de redactores de la revista Desde el Sótano y los grupos de juego que visitan Eriloe. Si quieres comunicarnos alguna noticia sucedida en tu mesa de juego, ponte en contacto con nosotros.