Sable Klingenthal

Mientras que a la caballería pesada de la época se la dotaba de una espada recta y más ancha de lo habitual, a la caballería ligera, sobre todo a la francesa, y a la armada se la equipaba con un sable curvo. La espada recta era preferida para dar estocadas (que según algunos teóricos de la época era la mejor forma de combatir desde el caballo), la hoja curva, sin embargo, era mejor para dar tajos (cuchilladas). En la práctica, los sables curvos se utilizaban para dar estocadas también y los tajos quedaron olvidados en las justas medievales (o en la época de los piratas). De entre los muchos sables de la época, el Klingenthal era uno de los más famosos.

Klingenthal fue una fábrica de espadas creadas por Luis XV, rey de Francia. Consideró, en su momento, que el estado debería ser dueño de las fábricas de armas de sus ejércitos. Los obreros especialistas se trajeron de Alemania y la fábrica se instaló en Alsacia. Su primer responsable fue un oficial retirado del arma de artillería y, quizás debido a esto, a los oficiales de la fábrica se les consideró miembros del arma de artillería. En 1801, los hermanos Coulaux son nombrados responsables de la fábrica haciendo que esta alcance cierta notoriedad como fabricantes de armas. La familia Coulaux fue responsable de la fábrica hasta su cierre en 1962.

La fábrica Klingenthal trabajaba la hoja del arma y luego se colocaba la empuñadura a la misma. Esto no se hacía en la fábrica de Alsacia, sino que podía realizarse en otros sitios. Por eso, las empuñaduras de este arma pueden ser muy diferentes entre sí. Afortunadamente, los fabricantes de este tipo de armas eran muy metódicos (o burocráticos) y marcaban la hoja con toda una serie de símbolos que permitían saber el año de fabricación, quien la inspeccionó e, incluso, donde se colocó la guarnición.

La hoja será curva, sin adornos, salvo que sea una espada especial, un solo filo (a veces dos) y, en ocasiones, dos acanaladuras en la hoja. El tamaño de la hoja era de unos 95 centímetros (105 totales) y la empuñadura solía hacerse en latón y, en ocasiones, madera.

Datos para 1808

* Las empuñaduras más elaboradas podían hacer subir mucho este precio.